Proponen crear grado 12 en bachillerato

Un documento sobre la educación superior en Colombia analizó el panorama académico en nueve ciudades del país, entre ellas Pereira.
Mientras algunas organizaciones proponen para Colombia un grado 12 de bachillerato que sea una especie de transición entre la secundaria y la educación superior, las universidades acortan sus semestres.
En el caso de la Universidad Católica de Pereira, algunas carreras pasaron de 10 a 9 semestres al argumentar razones como mejor aprovechamiento del tiempo académico.
Advierte el documento del Banco Mundial y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (0CDE) que en Colombia los muchachos terminan bachillerato a una edad más temprana que en otros países (16-17 años), pero salen peor preparados, -con algunas excepciones- y esto es una de las causas de la alta deserción.
El tema divide opiniones. Unos lo ven conveniente, otros no consideran que sea la solución ante los vacíos con los que llegan los jóvenes a la universidad.
El profesor de la Universidad Tecnológica de Pereira, Carlos Victoria no cree que aumentar un grado en bachillerato sea la solución, sino que hay que invertir más en calidad educativa desde la básica primaria. “Los muchachos están llegando semi analfabetas en prácticamente todas las materias. Hasta comprender un texto se les hace difícil”, explicó.
El docente considera que hay un sistema educativo fragmentado entre el bachillerato y la Universidad y que esta brecha debe superarse. En la UTP se ha realizado un ejercicio interesante que ha servido de puente y es el programa Ondas.
Por su parte la secretaria de Educación de Pereira, Patricia Castañeda, está de acuerdo con la creación de un grado 12 siempre y cuando esté enfocado a un proceso de formación en competencias laborales, es decir, que los jóvenes salgan preparados para iniciar carreras que demande el mercado laboral.
A su turno el exsecretario de Educación, Jorge Iván Arango, ve con buenos ojos la iniciativa si se hace
sobre tres bases: más fomento a la ciencia y la tecnología, que se cuente con los profesores que se requieran y que sea un tiempo de transición para que ellos definan realmente su vocación conforme a la competitividad.
“El acceso a la educación superior está aún lejos de ser equitativo para los estudiantes más pobres”, dice el estudio.