Según el censo oficial realizado en el 2005 por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), Cartagena tiene 205 barrios distribuidos en tres localidades: Histórica y del Caribe Norte (84), De la Virgen y Turística (53) y la localidad Industrial y de la Bahía (68).
Cada barrio es autónomo y con el paso de los años, estas poblaciones se han hecho más extensas sobre todo las que sitúan en la periferia, ocasionando que existan nuevos sectores o barrios de -invasión- en la ciudad.
La encuesta de Percepción Ciudadana Cartagena Cómo Vamos 2017, cuyos resultados fueron presentados este miércoles, revela que la sensación de inseguridad de los cartageneros se ha prologando a sus comunidades.
La encuesta señala que el 36 por ciento de los cartageneros se sienten inseguros en sus barrios, aumentando cuatro puntos en relación con las cifras del 2016.
Dicha percepción de inseguridad obedece en mayor parte a los atracos callejeros (57%) seguido de la presencia de pandillas (35%) y las drogas (28%).
Shirley Soto, presidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio La Esperanza denuncia que en su comunidad la problemática de pandillas requiere atención urgente por parte de las autoridades.
“Aquí hay mucha pandilla, nos preocupa que muchos jóvenes están integrando estos grupos y eso se debe a que la autoridad no hace presencia en el barrio. Por eso nos sentimos inseguros y aunque tenemos actividades para que los niño y jóvenes puedan ocuparse en su tiempo libre, la delincuencia siempre está presente”, sostiene.
La sensación de inseguridad en el barrio es inferior en ciudades como Pereira (12%), Medellín (13%) y Bogotá (34%); lo que evidencia que en Cartagena las comunidades están expuestas a flagelos como la delincuencia, el microtráfico, vandalismo y pandillas.
El 28 de junio del año anterior, el docente Gustavo Castro Cárdenas, de 33 años, salió de su casa hablando por celular con un compañero cuando fue sorprendido por dos asaltantes, quienes lo intimidaron con arma de fuego para arrebatarle sus objetos personales.
El docente del Sena se opuso y uno de los delincuentes le propinó cuatro tiros que acabaron con su vida, en el barrio Tacarigua, donde residía.
El hecho que conmocionó a la ciudadanía obligó al Distrito a estudiar la posibilidad de prohibir el parrillero en moto en toda la ciudad y se planteó la necesidad de que miembros de la infantería de marina patrullaran algunas zonas “criticas”. (Lea:Perimetral y otros barrios podrían tener vigilancia de la Infantería de Marina)
Aunque la encuesta destaca que el 65 por ciento de los cartageneros se siente satisfecho con su barrio, la cifra se redujo con respecto al 2016 que fue en un 68 por ciento.
“No tenemos nada que resaltar de positivo, estamos en una zona muy vulnerable. Aquí no hemos visto una inversión a gran escala. El barrio es inseguro pues la Policía le tiene miedo a los bandidos. No hay parques, requerimos atención", sostiene Ángel de la Cruz, líder en el barrio Olaya Herrera.
Otras cifras
Un 48 % de cartageneros siente satisfacción por el estado de las vías de su barrio.
Un 43 % de cartageneros siente satisfacción con los andenes de las calles del barrio.
Y el 30 % siente satisfacción con lo parques y zonas verdes.
Comentarios ()