Los delincuentes están logrando que algunos propietarios de casas del barrio El Carmelo vendan o arrienden.
Pero el círculo termina repitiéndose, porque quienes compran vuelven a mudarse; y quienes fungen de inquilinos terminan por entregar el apartamento, la casa o el local que contrataron.
Por todas partes se ven los avisos de “se vende” o “se arrienda”, la mayoría puestos por comerciantes que viven de la finca raíz, cuyos inmuebles estuvieron ocupados por almacenes de variedades o establecimientos de comidas que colapsaron ante las arremetidas de los asaltantes.
El Carmelo tiene 65 años de existencia, pertenece al estrato 2, hace parte de la Localidad 3, tiene mil viviendas y cinco mil habitantes.
En sus alrededores se levantan los barrios Blas de Lezo, El Socorro, Los Jardines, La Victoria, El Milagro, San Pedro Mártir, Las Reinas, El Reposo, La Gloria y La Central.
Víctor Pájaro Ceciliano, vicepresidente de la Junta de Acción Comunal, asegura que los delincuentes vienen de otros sectores, puesto que El Carmelo carece de ese tipo de habitantes, además de que hasta ahora no funcionan allí expendios de alucinógenos.
Aún así, los facinerosos atacan en cualquier sector y a cualquier hora, pero el más azotado es el correspondiente a la Avenida Kennedy, donde la actividad comercial tiene su mayor ebullición.
“Lo común es que roben bolsos y celulares; o atraquen a quienes están esperando el bus en una acera, pero ya llegan al extremo de meterse en los almacenes y en los negocios de comida”, cuenta Pájaro Ceciliano.
Los líderes comunales dicen que el barrio nunca había vivido un fenómeno como el que, desde hace unos cuatro años, los está atosigando, por lo cual pidieron la ayuda de la Policía Metropolitana de Cartagena, para crear frentes de seguridad que han empezado a conformarse en los diferentes sectores. La idea futura es instalar un CAI móvil que termine en estación policial.
Si alguna falencia importante caracteriza a El Carmelo, consiste en que nada de las cosas que apoyan el buen funcionamiento de un barrio le son propias: no tiene espacios recreativos, no tiene puesto de salud, ni instituciones educativas.
Por la falta de escenarios deportivos, jóvenes y niños deben trasladarse a El Socorro o a Los Jardines a practicar deportes; mientras que los pacientes deben usar el puesto de salud de Blas de Lezo.
Así mismo, para ellos aún no está claro si la Institución Educativa San Lucas pertenece a El Carmelo o pertenece a El Milagro. El único colegio público que tenía el barrio (Sociedad Amor a Cartagena) se transformó en un supermercado.
El único escenario recreativo es una cancha en malas condiciones, entre la Calle 15 y la Carrera 66, frente a la iglesia católica Parroquia Santa Lucía de El Carmelo.
Los activistas comunales pretenden rescatar ese espacio, pero en el momento solo visualizan pedir la ayuda de la Alcaldía Local 3 y de la Alcaldía Mayor de Cartagena para que los apoye en esa pretensión.
Una ayuda aún mayor le piden a las secretarías de Gestión de Riesgos e Infraestructura, para evitar una tragedia en la Manzana S, donde más de diez viviendas están amenazadas por un arroyo de aguas pluviales, que viene de las calles Bolivia y Santa Marta, el cual se fue formando a partir de las corrientes que rodaban por las zonas altas. Esas mismas corrientes socavaron la tierra y ahora son un conducto natural que se desborda y amenaza con orificar los cimientos de esos inmuebles.
OTROS PUNTOS
**Los habitantes carecen de sentido de pertenencia, empezando por la mala disposición de las basuras y la poca colaboración con los líderes comunales.
**Aunque casi todas las calles están pavimentadas, todavía hay cuatro que quedaron a medio pavimentar, y la intemperie está dando cuenta de ellas.
**La Avenida Kennedy no tiene andenes y los peatones caminan sobre ella exponiéndose a ser arrollados.
**Anteriormente, el barrio contaba con cuatro rutas de buses, de las cuales eliminaron dos para introducir el Transcaribe.
**La gente se queja de este servicio porque es demorado y escaso; y, mientras lo esperan, los atracadores aprovechan para hacer lo suyo en los paraderos.
Comentarios ()