Si en algo parece estar en mora el Distrito con sus ciudadanos es en la “reparación” que tendría que darle a los centenares de personas que tienen vehículos y que ven cómo estos se deterioran por el mal estado de las vías de la ciudad.
Mofles sueltos, muelles flojos, rines torcidos son algunos de los problemas mecánicos a los que se enfrentan los propietarios de carros, a quienes a diario les toca esquivar huecos, lomas y baches en las vías de Cartagena.
Y si bien se anuncian millonarias inversiones para mejorar la malla vial, la comunidad pide agilidad en estos procesos, habida cuenta que muchas vías están casi intransitables.
Y esto es lo que pasa en el tramo de vía que une a la avenida Pedro de Heredia (donde termina el tramo 4 de Transcaribe) con la Transversal 54, la cual está en tan malas condiciones que no tiene nada que envidiarle a una vía interveredal.
El problema es tan serio que justo en el sitio donde se unen las dos vías, los rebuscadores, de tanto echar tierra, han formado una loma que ahora dificulta el tránsito de toda clase de vehículos, sobre todo de taxis y automóviles, cuyos conductores deben transitar lento para no dejar en ese promontorio parte del mofle de sus vehículos, en el mejor de los casos.
INVERSIÓN
Prueba del mal estado en que se encuentra ese tramo de vía es que el Distrito ha dispuesto de dos mil millones de pesos para su arreglo.
Según un vocero de la Secretaría de Infraestructura del Distrito, esa vía será construida en concreto rígido y forma parte del paquete de obras del proyecto de inversión vial que con recursos del crédito por 80 mil millones de pesos ejecutará el Distrito.
La licitación será adjudicada el próximo 16 de septiembre y se espera que las obras comiencen a finales de octubre o principio de noviembre del presente año.
El consejo para los conductores parece ser que quien espera lo mucho, espera lo poco. Mientras tanto siga transitando como lo ha venido haciendo: despacio, con cuidado y buscando un pedacito de pavimento en buen estado.
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