Farándula


Bernardo Bertolucci homenajeado por el Festival de cine de Cannes

AFP

12 de mayo de 2011 10:18 AM

 
 El director italiano Bernardo Bertolucci, a quien el Festival de Cannes otorgó el miércoles una Palma de Oro honorífica, describió el cine como "la gran aventura" de su vida y confesó que hace un año, al sufrir graves problemas de salud, creyó que no podría rodar más.
  Bertolucci fue el encargado de declarar "abierto" el 64º Festival de Cannes, tras recibir esa Palma de Oro de honor, que dedicó al pueblo italiano, que "aún tiene fuerzas para luchar, criticar e indignarse".
  Obligado a desplazarse en una silla de rueda a causa de problemas en la columna, Bertolucci, de 70 años, había hablado antes con entusiasmo de su nuevo proyecto, la adaptación en tres dimensiones de una novela del joven escritor italiano Niccoló Ammaniti, "Io e te" (Yo y tú).
  "Me di cuenta que incluso en silla de ruedas podría hacer esta película. En mi cine hay mucho movimiento, y por eso quizás he sido castigado. Esta película cuenta la historia de dos jóvenes encerrados en el sótano de una casa. Es lo ideal para mí ahora: un lugar, dos personajes y las tres dimensiones", dijo.
  "Me fascinó la película 'Avatar', de James Cameron. También vi 'Pina Bausch', de Wim Wenders. Otros realizadores, entre ellos Werner Herzog y algunos más jóvenes que yo, se sienten atraídos por la 3D", dijo.
  "La 3D no es sólo adecuada para las películas de horror. Pienso que filmes como 'Ocho y medio', de Fellini, o 'Persona', de Bergman, serían formidables en esa técnica", añadió.
  Bertolucci comentó con humor en una rueda de prensa, antes de recibir esta noche la distinción de manos de su amigo Roberto de Niro --actor en su película "Novecento" (1976) y en la actualidad presidente del jurado de Cannes-- algunos de los momentos más importantes de su carrera.
  "He venido cuatro veces a Cannes a concursar con mis películas sin haber ganado nunca la Palma de Oro. La primera vez fue en 1964, con 'Antes de la revolución', presentada en la Semana de la crítica. A los franceses les gustó, pero los críticos la detestaron", recordó.
  "En 1976 con 'Novecento', un filme monstruo que dura cinco horas, con actores de Hollywood, pensé que no era justo presentarla al concurso. El presidente del jurado ese año era (Constantino) Costa Gavras.
  "El me dijo: es una lástima que no esté concursando, le habríamos dado la Palma de Oro", añadió.
  Nacido cerca de Parma, centro de Italia, el célebre realizador de " El último tango en París" (1972), dijo que el éxito mundial de esta película estuvo a punto de volverlo "loco", "de desestabilizarme". 
  "El cine a veces no es como el vino, que envejece bien, pero creo que 'El último tango' ha envejecido de buena manera, no necesita maquillaje para verlo nuevamente, sobre todo gracias a la presencia de Marlon Brando. El me dio tanto en ese rodaje sin darse cuenta, aunque al final no me quería ver", añadió.
  Bertolucci reveló que en esa época estaba muy influido por la literatura erótica del francés George Bataille, en particular libros como "Mi madre" y "El azul del cielo".
  "En el cine hay formidables afinidades electivas. Nagisa Oshima estaba preparando en Japón 'El imperio de los sentidos' (1976). Después lo conocí y nos dimos cuenta que ambos quisimos hacer algo con la sexualidad que nunca antes se había hecho en el cine", dijo.
  "Tanto él como yo escribimos escenas casi idénticas que después no rodamos. Sus personajes y los míos en 'El último tango' dicen algo como: no abramos la puerta ni las ventanas para conservar nuestros olores en el cuarto. Pero no la filmamos porque es difícil presentar los olores en el cine", agregó.
  Sobre "El último emperador" (1988) Bertolucci dijo que "ha sido la aventura más grande de mi vida. En los dos años de preparación y rodaje, de 1984 a 1986, pude ver cómo iba cambiando la vida en China. Era la época de los primeros grandes cambios. Hasta nos permitieron entrar con cámaras en la Ciudad Prohibida. Fue un gran privilegio".
  También se refirió a las fructuosas relaciones que tuvo con el Cinema Novo brasileño, en los años 60, y en particular con Glauber Rocha.
  "Su cine es volcánico. En eso coincidíamos. Decíamos que nuestras películas eran, debían ser como toros miuras, tan compactas como estos animales que un mosquito no podría penetrar su piel, ni siquiera entrarle por el trasero".
 
 
 

Se ha producido un error al procesar la plantilla.
Invocation of method 'get' in  class [Ljava.lang.String; threw exception java.lang.ArrayIndexOutOfBoundsException at VM_global_iter.vm[line 2204, column 56]
1##----TEMPLATE-EU-01-V-LDJSON----
 
2   
 
3#printArticleJsonLd()
 

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS