‘The Black Keys’, ‘Fun’ y los ‘Mumford & Sons’ triunfan en los Grammy

El trío neoyorquino Fun y los británicos Mumford & Sons se llevaron los premios Grammy más prestigiosos el domingo, en una ceremonia ecléctica que no mostró preferencias tan marcadas como en el pasado, pero que reservó galardones para el colombiano Juanes y la mexicana Lila Downs. 
Si bien la fiesta de la música en Los Ángeles no fue dominada por ningún artista en particular, como ocurrió el año pasado con la británica Adele, por ejemplo, el rock indie de Fun se llevó dos de los premios más importantes: Mejor Artista Nuevo y Canción del Año por su hit “We Are Young”. 
“No sé en lo que estaba pensando con el coro de esta canción”, dijo el íder de la banda, Nate Ruess, de 30 años, sobre el título que en español significa “Somos jóvenes”. “Si esto lo ven en alta definición, todos podrán ver que no somos demasiado jóvenes”, prosiguió. 
Poco después, Ruess dijo a periodistas tras bastidores: “Hemos estado haciendo esto desde hace mucho tiempo, desde hace 12 años, y por fin el año pasado ocurrió. (Los premios) significan mucho”. 
Los rockeros folk Mumford & Sons ganaron dos gramófonos, uno de los cuales era el más importante de la noche: Álbum del Año, por “Babel”. 
Pero los Black Keys fueron quienes se llevaron la mayor cantidad de trofeos: cuatro. La banda de rock garage sorprendió con Mejor Álbum de Rock por “El Camino” y mejores canción y actuación rock por el tema “Lonely Boy”, respectivamente, además de Productor del Año para su realizador, Dan Auerbach. 
De su lado, el belga-australiano Gotye se quedó con tres galardones: Grabación del Año (que premia la producción de una canción), por el hit “Somebody That I Used To Know” del álbum “Making Mirrors”, que ganó además Mejor Música Alternativa y Mejor Actuación Pop Dúo o Grupo. 
Pero el cantautor de R&B Frank Ocean se llevó sólo dos de los seis gramófonos a los que aspiraba por el unánimemente aclamado disco “Channel Orange”. 
La fiesta comenzó con un premio para la británica Adele a Mejor Actuación Pop Solo por “Set Fire To The Rain (Live)”. 
“Gracias, esto es increíble, yo sólo había venido a participar en la fiesta”, dijo Adele, ganadora el año pasado de seis premios Grammy. 
El trofeo fue entregado por el rapero cubano-estadounidense Pitbull y Jennifer López, quien llevaba un vestido negro que cubría su torso, pero mostraba generosamente una pierna. 
“Como pueden ver, leí el memo”, bromeó la cantante y actriz, refiriéndose al correo electrónico que recibieron las artistas invitadas hace una semana, en el que el canal CBS -que transmite la ceremonia en Estados Unidos- les pidió que se vistieran con decoro. 
El show abrió con una actuación de la niña mimada del country, Taylor Swift, y continuó con una memorable colaboración entre el veterano británico Elton John y su compatriota Ed Sheeran, un cantautor de rock alternativo de 21 años. 
También destacó el ex NSync Justin Timberlake, quien se subió por primera vez al escenario de los Grammy para cantar “Suit & Tie”, antes de que Carrie Underwood cantara “Blown Away”, con un vestido pródigo en efectos visuales. 
Elton John y los Mumford & Sons rindieron tributo al fallecido Levon Helm (baterista y cantante del grupo de rock canadiense The Band), poco después de que Sting, Bruno Mars y Rihanna protagonizaran un épico homenaje a Bob Marley, al que se unieron Ziggy, Stephen y Damian, hijos del dios del reggae. 
Los principales ganadores de la sección no televisada de los Grammy fueron Juanes (Mejor álbum latino por “MTV Unplugged”), Lila Downs (Mejor álbum regional mexicano por “Pecados y Milagros”) y la banda chicana Quetzal (Mejor álbum latino rock por “Imaginaries”), además de los jazzistas Chick Corea y Arturo Sandoval.
55° Entrega de los Premios Grammy