El acceso a una de las playas más hermosas y cristalinas de la zona insular de la ciudad ya no será gratis.
Con la construcción y la apertura del puente Campo Elías Terán, el pasado 11 de abril, se unió la ciudad con la isla de Barú, para que el acceso de los cartageneros y turistas se hiciera más fácil y el desarrollo llegara a la isla, pues antes de la construcción del puente se accedía a la zona únicamente por embarcación o ferry desde Pasacaballos.
Sin embargo, con la estructura el número de visitantes a Playa Blanca aumentó, sobrepasando su capacidad. Lejos está de ser un lugar tranquilo, no hay donde parquear y mucho menos donde broncearse, según lo dicho por las autoridades.
Por estas razones y con el fin de garantizar la seguridad en la isla, la Secretaría del Interior, en cabeza de Roberto Barrios, junto con el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte de Cartagena (DATT) y Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo (con jurisdicción en Barú), entre otras entidades, se reunieron ayer en las instalaciones de la Alcaldía para tomar algunas medidas.
En el consejo de seguridad se concluyó que se establecerá próximamente, el valor de la tarifa a pagar por parte de los visitantes que acudan a Playa Blanca, y sólo se exceptuará del pago a la comunidad de Barú.
Asimismo se ejercerá mayor control a todos los vehículos, en especial a aquellos que se parquean sobre las vías.
Una vez se llegue a la máxima capacidad en Playa Blanca, se devolverán a los vehículos que pretendían dirigirse a la zona.
A sabiendas de que es mar abierto, la zona de bañistas será delimitada con boyas por parte de Distriseguridad.
La recolección de las basuras también es un tema importante, el consorcio encargado deberá garantizar la adecuada prestación del servicio en la isla.
Según las autoridades, apenas se ultimen detalles como el valor de la tarifa y el lugar dónde se cobrará la entrada a Playa Blanca, comenzará a operar el cobro, lo que se dará dentro de poco y será dado a conocer a los habitantes de Barú.
EXCEDE LA CAPACIDAD
Para el capitán de Corbeta Carlos Andrés Martínez Ledesma, jefe de Área Protegida de Parques Nacionales, Playa Blanca tiene una capacidad de carga igual a la de cualquier lugar del país, por ello el incremento de turistas influye negativamente en esta.
Según Martínez Ledesma, la capacidad de Playa Blanca sería de unos 3 mil 300 visitantes, sin embargo el número de personas que llegan a la zona es cuatro veces mayor a dicha cifra.
“Hay más moscas por las basuras que dejan los visitantes en las lagunas costeras, y el uso de sanitarios no es suficiente para atender al número de turistas que llega a la isla”, dijo.
“La gente que va a esa playa en temporada alta no puede si quiera acostarse y broncearse, eso parece un estadio de fútbol. Los parqueaderos no dan abastos, los vehículos se han metido en predios privados, así como en Playetas (afectado por la erosión), único acceso al pueblo de Barú, obstaculizando el paso de sus habitantes”.
Recalcó que la afectación en la isla también es económica, pues los habitantes de Barú dejan de vender sus productos debido a que los visitantes llevan sus alimentos, carpas, entre otros objetos.
Por motivos como los antes mencionados el Capitán de Corbeta cree que las medidas a tomar son necesarias con el objetivo de que no se siga degradando el ambiente y se afecten los habitantes de la isla.
Dijo que los operadores turísticos de la zona insular también se han perjudicado, pues algunos turistas clientes dejan de ir a la isla.
“Sería irresponsable dejar que esto continúe así, como en los estadios se necesita limitar el ingreso para evitar accidentes. Es molesto para quien ya entró a Playa Blanca no poder bañarse”, sostuvo.
TARIFA ECONÓMICA
Aunque no se ha establecido la tarifa para ingresar a Playa Blanca, el Capitán afirma que será económica.
Explicó que otros parques naturales del país también cobran el ingreso a estos y cierran el acceso cuando es copada su capacidad, tal como lo hace el Parque Tayrona, en Santa Marta.
“Con esto se ha logrado mantener de una manera aceptable el parque. Su cobro es de los más altos del país, un poco más de 15 mil pesos, pero en Cartagena será más económico”.
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