De la angustia a la tranquilidad se pasó ayer en torno a la suerte del inmueble que ocupa el Hospital Universitario del Caribe (HUC) y pertenece a la Universidad de Cartagena.
Al término de una mesa de trabajo en la que, convocados por el gobernador de Bolívar, Dumek Turbay, participaron el rector de la Universidad de Cartagena, Édgar Parra Chacón; el agente especial interventor del HUC, Fernando Trillo; entre otros, se dio a conocer que se liquide o no el HUC, el inmueble continuará al servicio de la atención en salud y de la formación académica.
“Queremos mandar un parte de tranquilidad al pueblo bolivarense, a la comunidad usuaria del HUC y a los estudiantes del área de la salud tanto pregrado como posgrado, en el sentido de que la posición tanto del gobernador como de la Universidad de Cartagena es que cualquiera que sea la decisión que tome la Superintendencia Nacional de Salud frente a la intervención, sea que continué o se liquide el Hospital Universitario, la atención no se cierra”, afirmó Édgar Parra Chacón, rector de la UdeC.
Indicó que “se seguirán prestando servicios de salud y procesos formativos en medicina y especializaciones del área médico-quirúrgica”.
El rector recalcó que terminó el contrato de comodato que sostenía con el hospital y le solicitó la entrega del lote y el inmueble que ocupa, para evitar que la propiedad resulte involucrada en una posible liquidación. “Es un blindaje en el sentido de que ya la Superintendencia Nacional de Salud sabe que en cualquier decisión que tome, el inmueble es propiedad de la Universidad de Cartagena y no forma parte de los acreedores”.
El gobernador de Bolívar, Dumek Turbay Paz, quien en un principio rechazó la decisión de Parra por temor a que pusiera en riesgo los servicios prestados en el HUC, manifestó que entendió las razones del rector y ahora lo respalda.
“Hay un antecedente frente al anterior cierre del hospital en donde el inmueble entró a ser parte de las garantías para el pago de los acreedores y eso es gravísimo. El inmueble no puede entrar a hacer parte de la masa liquidatoria porque es de la universidad y no de la empresa que lo está usando. Ese proceso que hace la universidad es una acción puntual para proteger su patrimonio”, dijo Turbay, quien también es presidente del Consejo Superior de la Universidad de Cartagena.
En caso de liquidación
El mandatario departamental sostuvo además que el servicio de atención en salud que se presta en el inmueble que ocupa el HUC no se detendrá un solo segundo, incluso ya se está trazando el plan que se activaría en caso de que la intervención de la Supersalud al HUC termine en la liquidación del centro asistencial.
“Si llegara a plantearse el hecho de que la intervención termine en la liquidación de esa empresa, el día que se cierre la puerta de esa empresa y se liquide, al segundo debe estar operando una nueva empresa”, dijo.
Destacó que el próximo 28 de noviembre, fecha en que se vence el término de un año por el que se programó la intervención, es clave para definir el rumbo del HUC.
“Ese día debe haber claridad sobre si se prorroga la intervención, se salva el hospital o se tiene que proceder a la liquidación. De darse esto último ya estamos construyendo el plan b con la Universidad de Cartagena y la Gobernación, que sería definir qué empresa entraría a prestar el servicio, lo que significa que si se apaga el HUC, inmediatamente estamos preparados para que una nueva empresa pueda prestar el servicio, lo que significa que el inmueble seguirá prestando un servicio de salud y formación académica”.
Turbay añadió que ese plan contempla “un gran concurso de interesados en el tema, desde lo público y lo privado (...) Coosalud y Mutual Ser, que tienen gran renombre nacional y viven de reconocimiento en reconocimiento por su excelente labor, son parte de las empresas desde lo privado que hemos consultado frente a una nueva operación”.
Abono a la deuda
El Universal consultó al gobernador de Bolívar sobre la deuda de 4.600 millones de pesos que la Secretaría de Salud Departamental sostiene con el HUC.
“Hoy (ayer) estaremos transfiriendo los recursos de la estampilla. Hay un recaudo que vamos a girar de $885 millones y las facturas que tenemos ahora mismo en auditaje suman unos $3.800 millones”, informó Turbay.
“Queremos normalizar los pagos rápidamente -agregó- y hacer más rápida la labor de auditaje de las cuentas y facturas que presenta el hospital para apoyar su salvamento. Ahí hemos reconocido que debemos ser más ágiles y hemos dado instrucciones al equipo económico y al de salud para que trabajen eficientemente con el hospital, de modo que esos procesos puedan salir muy bien y eso le dé condiciones de manejo para el salvamento”.
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