Por estos días los moradores de Villas de la Candelaria se encuentran inconformes por la instalación de un separador en la entrada principal de esta urbanización que les restringe una vía fácil de acceso a los vehículos y por ende obliga a los conductores a trasladarse hasta el retorno ubicado en el barrio El Pozón para poder ingresar a esta comunidad.
La situación ha generado molestia en los residentes pues afirman estar “encerrados” y denuncian que el Distrito no realizó una consulta previa para determinar las ventajas o desventajas que podría ocasionar el separador, ubicado en la doble calzada de la vía la Cordialidad. Los más afectados son las personas que tienen sus propios vehículos pues aseguran que el Departamento de Tránsito y Transporte (DATT) pudo optar por otras alternativas como un semáforo en la zona o la ubicación de otra rotonda.
“El día 20 de octubre fuimos sorprendidos al ver que habían instalado una barra en la entrada de nuestra urbanización, sin avisarnos ni consultarnos. Ahora nos estamos viendo perjudicados porque tenemos que subir hasta el Pozón para poder ingresar a la urbanización lo cual resulta tedioso en horas pico ya que el flujo vehicular es mayor y nos demoramos mucho para ingresar hacia nuestras viviendas”, sostuvo Sotero Cañate, habitante de la urbanización.
La situación es caótica para los moradores ya que el separador divide un tramo de La Cordialidad para evitar que los vehículos que se desplazan por esta zona realicen giros frente a esta urbanización. “Cuando se estaban realizando los trabajos de reconstrucción y adecuación de la carretera La Cordialidad, ya la urbanización existía y nos dejaron nuestra vía de acceso. No entiendo porque ahora nos la cierran”, agregó Cañate.
Para Sandra Herrera Martínez, presidenta de la Junta de Acción Comunal de Villas de La Candelaria la situación se torna preocupante pues con el cerramiento, los habitantes quedan expuestos a situaciones de inseguridad por el recorrido que deben hacer hasta el barrio vecino.
“Lo que buscamos es prevenir situaciones de inseguridad. Ahora como la mayoría debemos desplazarnos hasta el Pozón y vemos que para esa carretera donde se ubica la rotonda no hay alumbrado público ni hay vigilancia, nosotros los residentes nos sentimos expuestos a cualquier situación de inseguridad”, comentó Herrera Martínez.
Ella al igual que el resto de sus vecinos manifestó a este medio su indignación y asegura que el DATT actuó de forma arbitraria al cerrar la vía de acceso a esta urbanización.
DATT RESPONDE
En diálogo con ElUniversal.com.co un vocero del Departamento de Tránsito y Transporte explicó que el boquete en la entrada de la urbanización Villas de La Candelaria fue cerrado por el Consorcio Ruta del Sol y se realizó con el objetivo de mejorar el flujo vehicular en esta zona.
“Desde la instalación de ese separador no tenemos un accidente más en ese sector. Se ha mejorado la movilidad en esa vía transversal (La Cordialidad), se ha disminuido la congestión vehicular. Ese boquete nunca debió existir pues se hacían cruces peligrosos y al intentar hacer estos cruces se impedía la movilidad en ambos sentidos, sumado a los accidentes diarios que se presentaban”, explicó el vocero.
Así mismo señaló que el boquete o entrada de acceso a la urbanización fue cerrado meses antes con maletas plásticas pero los mismos moradores quitaron los materiales.
Los habitantes de Villas de La Candelaria alistan posibles manifestaciones y denuncian que pese al cerramiento, varios motociclistas se meten por los extremos de la barra para evitar llegar hasta el Pozón y de esta forma, quedan expuestos a todo tipo de accidentes.
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