El líder de una aldea china y cuatro de sus familiares fueron asesinados en el más reciente incidente de acuchillamientos en el país, informó ayer la prensa estatal. Entre las víctimas esta un bebé de cinco meses. El atacante, Wang Haiying, se entregó a las autoridades luego que la Policía hiciese disparos de advertencia, dijo que se había pasado meses planeando el ataque contra Wang Chengguo, un jefe de aldea en la provincia central de Henan, dijo la agencia noticiosa oficial Xinhua. El atacante alegó una disputa sobre tierras y a su creciente frustración con la pensión gubernamental para su madre. Entre los muertos estaba una nieta bebé del líder aldeano de 56 años. Su nieto de seis años fue gravemente herido. CANALES DE QUEJAS Varios incidentes de acuchillamientos múltiples, especialmente en escuelas, han ocupado los titulares de la prensa china este año. Los expertos creen que la raíz del problema es la amplia frustración por el creciente brecha económica y social y la corrupción, además de la escasez de cana-les legales para personas que tienen quejas. En espacio de dos meses, el país vivió cinco ataques mayores contra niños en escuelas, que dejaron 17 muertos y más de 50 heridos. En otro caso muy conocido, un hombre irrumpió en una oficina judicial en el centro del país y mató a tiros a tres jueces. Las estadísticas oficiales dicen que el delito violento aumentó 10% el año pasado en China, con 5,3 millones de casos de homicidio, robo y violación reportados. Fue la primera vez desde el 2001 en que se reporta un aumento de la delincuencia, dijo la Academia China de Ciencias So-ciales en febrero. El presupuesto de este año incluye grandes aumentos de gastos para la seguridad pública.
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