Alejado de las cámaras y la actividad política diaria desde hace casi un mes debido a una lesión en la rodilla, el mandatario venezolano Hugo Chávez retomó su actividad este domingo con su programa semanal “Aló Presidente”, horas antes de iniciar una gira por Brasil, Ecuador y Cuba.
Activo y de buen humor, el jefe de Estado realizó su programa dominical desde el palacio presidencial de Miraflores en Caracas, aunque su intervención fue excepcionalmente corta y no superó las dos horas.
Chávez, que ha acostumbrado a los venezolanos a apariciones prácticamente diarias en la televisión y a largos discursos, respetó escrupulosamente este alejamiento forzado de la vida pública, el más largo desde su llegada al poder en 1999.
Desde principios de mayo, la red social Twitter ha sido su mejor herramienta para comentar la actualidad, hacer anuncios y comentar la evolución de su lesión.
“Me voy a cumplir con este compromiso que no puede cumplir hace un mes por esta rodilla que aún me sigue molestando. Dolorcito por aquí y por allá, pero bueno, adelante vamos”, anunció Chávez.
Los destinos de su gira son los mismos que se habían previsto en mayo, cuando el jefe de Estado tuvo que suspender el viaje debido a su lesión.
El presidente venezolano comenzará su gira el lunes, en un esperado encuentro con su par brasileña Dilma Rousseff. Esta cita, la primera desde la toma de posesión de la jefa de Estado brasileña, en enero, tuvo que ser pospuesta en varias ocasiones por razones de agenda.
“Es la primera reunión con Dilma. Brasil y Venezuela somos un motor de la integración latinoamericana y vamos a firmar varios convenios”, dijo Chávez, citando acuerdos en las áreas de agricultura, industria, vivienda y finanzas, entre otros.
“Siguen soplando buenos vientos (con Brasil). Una nueva era se abrió en América del Sur, mientras Europa anda de crisis y en crisis y el imperio (estadounidense) anda lanzando bombas”, agregó Chávez, en respuesta a los rumores que apuntan a un enfriamiento de la relación bilateral.
El presidente venezolano anunció que durante su visita se firmará un convenio “para un financiamiento de entre 3.000 y 4.000 millones de dólares a través de la empresa constructora Odebrecht” que se destinarán fundamentalmente a proyectos de vivienda.
Según el jefe de Estado, el acuerdo se concretó durante la visita a Caracas del ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, el pasado jueves.
Chávez y Rousseff también revisarán el estado del comercio bilateral, que superó los 4.600 millones de dólares en 2010 con un saldo favorable a Brasil.
Además, mencionarán, según Chávez, cuestiones como la entrada plena de Venezuela al Mercosur, que no termina de concretarse, o la refinería conjunta que la brasileña Petrobras y la venezolana PDVSA prevén construir en el noreste de Brasil, que sufre atrasos con respecto a los planes por problemas de financiación.
Los dos mandatarios han subrayado en diversas ocasiones que desean impulsar la cooperación labrada en la era Lula y mantener un ritmo de encuentros trimestrales.
“Los equipos (venezolano y brasileño) están integrados. Hemos desarrollado un altísimo nivel de conocimiento y confianza mutua y además, ya hay muchos proyectos que están en marcha”, recalcó este domingo el ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro.
Según el ministro, “hay excelentes relaciones con las empresas brasileñas que trabajan en Venezuela” y además un grupo de inversores interesados en hacer negocios en el país.
“Estamos en un momento de florecimiento de las relaciones con Brasil”, celebró Maduro.
Tras su visita a Brasil, Chávez se reunirá en Ecuador con su par Rafael Correa, con el que mantiene encuentros trimestrales, y finalizará su gira en Cuba, donde será recibido por el presidente Raúl Castro y probablemente por el líder Fidel Castro, al que el mandatario venezolano considera una especie de padre político.
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