EEUU evaluará solicitudes de residencia de cubanos liberados

Estados Unidos afina los detalles para tramitar con celeridad la solicitud que pudiera hacer algún preso político cubano recién liberado para radicar en este país. “Estamos trabajando de cerca con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) para hallar la manera más expedita de procesar cualquier solicitud que estos individuos puedan hacer, y aún afinamos los detalles”, dijo el lunes el portavoz del Departamento de Estado Philip Crowley. “No estoy al tanto de que se hayan formulado solicitudes formales para venir a Estados Unidos. Pero evaluaremos las solicitudes una por una”, agregó. Varios de los 26 prisioneros políticos cubanos que llegaron a España después de que la Iglesia católica y el gobierno español negociaran con La Habana la liberación de 52, han expresado públicamente su interés de radicarse en Estados Unidos. Uno de los 26 ya se desplazó a Chile. Crowley dijo que el proceso para que cualquiera de estas 26 personas venga a Estados Unidos se complica debido a que está involucrado un tercer país (España), pero “ello por sí solo no excluye a nadie para venir a Estados Unidos”. Los liberados, que aceptaron abandonar Cuba y viajar a España, forman parte del llamado “Grupo de los 75”, condenados en el 2003 bajo cargos de recibir dinero y orientación de gobiernos extranjeros, en especial Estados Unidos, para socavar a la revolución cubana. La secretaria de Estado Hillary Clinton le dijo al ministro español de Relaciones Exteriores Miguel Angel Moratinos que Washington estaría dispuesto a recibir a los disidentes siempre y cuando la transferencia no viole ninguna ley. Estados Unidos maneja habitualmente la migración desde Cuba con la política conocida como “pies secos-pies mojados”, según la cual los cubanos detenidos en el mar son repatriados a la isla, mientras que quienes tocan territorio estadounidense generalmente pueden quedarse. Por otra parte, Crowley describió como una “misión comercial” el viaje iniciado la víspera por el gobernador de Nuevo México, Bill Richardson, a la isla caribeña. Pero agregó que “conversamos con él la semana pasada, lo actualizamos en el caso de Alan Gross y le pedimos que lo mencionara durante sus conversaciones con funcionarios cubanos esta semana”. El estadounidense Gross fue arrestado en diciembre en La Habana sin que se le formulen cargos. Pese a que el Departamento de Estado y el despacho de Richardson presentan su viaje de cinco días como una misión comercial, se espera que el gobernador aborde temas políticos durante su estadía en la isla, tal como lo ha hecho en otras ocasiones. La visita de Richardson se produce en momentos en que el gobierno estadounidense considera expandir las oportunidades para que estudiantes, educadores e investigadores visiten Cuba, lo cual ha generado protestas de algunos legisladores estadounidenses pese a que la medida dejaría intacto el bloqueo comercial impuesto hace casi 50 años contra el régimen comunista.