Ex guerrillero es favorito para ganar presidencia en Uruguay

De ex guerrillero que se alzó en armas contra gobiernos democráticos en los años sesenta, José Mujica fue construyendo una nueva imagen política hasta llegar a mensajes de concordia, que lo ha puesto en los umbrales de ser el próximo presidente de Uruguay. Las encuestas lo tienen como amplio favorito para imponerse al ex presidente Luis A. Lacalle en la segunda ronda de mañana. A los 74 años, Mujica goza las mieles de su probable victoria respaldada por números alcanzados en la primera vuelta del 25 de junio de un 49%, y de esa forma, acentuando su campaña de diálogo y reclamando no enjuiciar a los rivales políticos, el viejo tupamaro puede alcanzar la cima política de la mano del voto. Mujica y su “Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros” han llegado a la presente instancia, construida lentamente desde 1989 cuando fueron admitidos en las filas de la coalición política del Frente Amplio, un conglomerado de 20 partidos y sectores que se enrolan en todo el arco ideológico. SEGUIDOR DE CHÁVEZ Luis A. Lacalle Lacalle ha calificado la personalidad de Mujica como un eventual riesgo y aventuró que un Gobierno presidido por él y su sociomayoritario, el partido Comunista, además del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, Uruguay, se enfilará hacia el socialismo, eventualmente seguidor del presidente de Venezuela Hugo Chávez. Aunque el presidente socialista Tabaré Vázquez había mostrado su favoritismo para ser candidato presidencial al economista Danilo Astori, controversiales congresos del Frente Amplio en lo que pareció un desacato, eligió a Mujica como su candidato presidencial, con el entusiasta apoyo del partido Comunista, otrora opuesto a los tupamaros. Ese intento ha resultado mayoritario y el proceso político fue derribando muros de escepticismo, apoyados por una maquinaria sin mayores disonancias internas, hasta llegar a este momento donde resta sólo cruzar el umbral para ingresar a la presidencia uruguaya a partir del primero de marzo de 2010, en reemplazo de Vázquez. LA IMAGEN DE MUJICA Está claro que la imagen de Mujica de subversivo junto a sus camaradas que asesinaron, secuestraron, incendiaron y robaron, fue con el paso de los años quedando relegada con apoyos elaborados que lo han presentado como un virtual héroe en el combate a la dictadura militar (1973-1985), que muchos analistas consideran que no corresponde a la realidad. Cuando los tupamaros iniciaron su acción subversiva en 1963, el país estaba bajo gobiernos democráticos y se recuerda que en una de sus visitas a este país, el guerrillero argentinocubano Ernesto “Che” Guevara puso en duda la viabilidad armada. Pero los tupamaros no se arrepintieron de su camino y continuaron hasta que en 1972 fueron derrotados por las fuerzas armadas y se convirtieron de pronto en uno de los argumentos para que en 1973 se impusiera una dictadura.