Interrumpen búsqueda de mineros atrapados en Chile

Tres grupos de rescatistas iniciaron este sábado la búsqueda del grupo de 34 mineros atrapados desde el jueves en un yacimiento de oro y cobre del norte del país, pero la operación debió interrumpirse algunas horas después por un nuevo derrumbe que ponía en peligro a los socorristas. Los rescatistas habían ingresado al interior de la mina a través de una chimenea de ventilación, pero un derrumbe puso en peligro la vida de los tres grupos, por lo que debió suspenderse esa vía al resultar algunos de ellos heridos. El ministro de Minería, Laurence Goldborne, dijo que el ducto de ventilación “ya no es una opción” para intentar el rescate de los mineros atrapados. Goldborne admitió que “las probabilidades (de encontrar vivos a los mineros atrapados) hoy día son más escasas de las que eran ayer”. “Tengo mucha pena”, agregó con evidente emoción. Temprano este jueves, tres grupos de socorristas habían ingresado al interior del yacimiento a través del ducto de ventilación en un trabajo que se presumía debía durar unas ocho horas hasta llegar al sitio en que se presume pueden haberse refugiado los 34 mineros. El sitio es un pequeño refugio de emergencia de unos 50 metros cuadrados a donde habrían escapado tras el derrumbe de rocas que se produjo la tarde del jueves. El refugio cuenta con oxígeno, agua y algunos alimentos. El lugar, sin embargo, contaría con una cantidad incierta de oxígeno, por lo que el rescate se hace contra el tiempo. Algunos funcionarios han señalado que la reserva de oxígeno disponible en ese lugar podría sólo durar unos dos días. La mina, a unos 850 kilómetros al norte de Santiago, está enclavada entre cerros del desierto del norte. Las autoridades nacionales y regionales han instalado en el lugar centros asistenciales de emergencia, en caso de que se pudiera rescatar a los mineros. También se instaló una carpa para atender a los familiares de los atrapados, que están apostados a la espera del rescate, a los que incluso se les ha brindado atención sicológica. En el lento trabajo de rescate se cuenta con un equipo especial traído desde Francia que podría detectar la presencia de los mineros mediante golpes o vibraciones que puedan realizar en su lugar de encierro, ubicado a unos 300 metros de profundidad. La mina cuenta con una red de túneles de 7 kilómetros de extensión. Los tres grupos de rescatistas, integrados cada uno por ocho personas, portaban equipos de emergencia y de comunicación. Los rescatistas ingresaron a la mina a través de una chimenea cuya tubería incluso tuvo que ser reforzada para facilitar el acceso de los tres grupos. Sin embargo, las autoridades reconocen que el escape de los mineros hacia el lugar de protección de emergencia es una conjetura y que no se cuenta con señales que confirmarían esa hipótesis. Ese lugar está situado a varios centenares de metros del punto donde se produjo el derrumbe de rocas y que por su magnitud no ha podido ser perforado para permitir el rescate. El yacimiento de oro y cobre no cuenta con una vía de escape, como debería tenerlo, según denunciaron dirigentes sindicales de la mina. Los trabajadores denunciaron además la falta de condiciones de seguridad en la mina, que ya hace dos años tuvo también un accidente. Los propietarios de la mina aseguraron que contaban con todas las medidas de resguardo. Pero tardaron el jueves seis horas en informar del accidente a las autoridades. El presidente Sebastián Piñera, que estaba en Bogotá para la transmisión del mando en Colombia anuncio que anticipaba el regreso a Chile. “Debo regresar a mi país, que estamos viviendo tiempos de tragedia ya que hay 34 mineros chilenos que están atrapados a 300 metros de profundidad y es posible que el oxígeno este escaseando y hemos hecho lo humanamente posible por rescatarlos con vida...y no solamente estamos ahora en las manos de hombres sino en las manos de Dios. Yo siento que mi deber es estar al lado de ellos y con sus familiares”, dijo Piñera a la prensa en la capital colombiana.