Militares de Corea del Norte y del Sur se enfrentaron con cañones

Una patrullera naval norcoreana con grandes dañados se retiró ayer envuelta en llamas a sus aguas territoriales tras mantener un breve inter-cambio de disparos con cañones contra un navío surcoreano a lo largo de su disputada costa occidental, en el mar Amarillo, dijeron las autoridades surcoreanas. El primer enfrentamiento naval en siete años estalló una semana antes que el presidente Barack Obama acuda a Seúl, desatando sospechas que el régimen comunista intenta incrementar las tensiones para obtener una mayor ventaja negociadora. No hubo bajas en el bando surcoreano, anunció el Estado Mayor Conjunto en una declaración, y no quedó en claro si las hubo entre los norcoreanos. Ambas partes se culpan mutuamente de violar sus aguas territoriales. ENVIADO ESPECIAL El enfrentamiento con cañones ocurrió al mismo tiempo que Obama decidió despachar un enviado especial a Pyongyang para dialogar sobre el programa nuclear bélico de los comunistas. Aunque no fue establecida la fecha, las negociaciones serían las primeras realizadas directamente desde que Obama llegó a la Casa Blanca en enero. “Fue una provocación internacional por parte de Corea del Norte para llamar la atención antes de la visita de Obama”, comentó Shin Yul, profesor de ciencias políticas de la Universidad Myongji de Seúl. Agregó que el régimen comunista advirtió a Obama que desea reemplazar el armisticio que puso fin a la guerra en la península coreana en 1953 con un tratado de paz permanente al mismo tiempo que mantienen su arsenal nuclear. Washington ha mantenido de forma consistente que Pyongyang debe abandonar su arsenal nuclear a cambio de que sea concluido un tratado de paz. Corea del Norte ha efectuado dos pruebas nucleares subterráneas desde el 2006 y cuenta al parecer con plutonio suficiente para media docena de ojivas nucleares.