Misión de la SIP llega a Bolivia para abordar ley contra el racismo

Una misión de la Sociedad Interamericana de la Prensa (SIP) llegará el lunes a Bolivia para respaldar ante el presidente Evo Morales las objeciones de un sector de la prensa boliviana a dos artículos de una ley contra el racismo, dijo el viernes una fuente de la patronal. Tres altos dirigentes de la SIP "están viniendo para reforzar los pedidos que se han hecho para que se modifique la ley" en los artículos que atañe a la libertad de expresión, dijo Juan Javier Zeballos, vocero de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), que reúne a propietarios de medios. La SIP abogará en favor de periodistas y dueños de medios que protestan y realizan una huelga de hambre desde hace dos semanas contra dos artículos de una ley contra el racismo que, según éstos, atentan contra la libertad de expresión. Las patronales de medios y los sindicatos de trabajadores de la prensa rechazan los artículos 16 y 23 de la ley contra el racismo que castigan a medios de comunicación incluso con cerrarlos en caso de alguna manifestación racista, y juzgan a periodistas que difundan noticias discriminatorias. Las protestas encontraron eco en organizaciones civiles y en legisladores de derecha, razón por la que el gobierno ve fines políticos de por medio. "Algunos periodistas, algunos medios de comunicación están resistiendo a la Ley de Lucha Contra el Racismo, eso a mí me ayuda bastante en vez de que nos desgaste y aquí gracias a ellos vamos a abanderar la lucha contra el racismo en el mundo no solamente en Bolivia", razonó el presidente Evo Morales. El defensor del Pueblo, Rolando Villena, demandó en tanto "despolitizar la ley para que sea representativa" en el inicio de reuniones entre el gobierno y organizaciones representativas, algunas de la prensa y medios independientes, para reglamentar la ley. La norma antirracista fue promulgada el pasado viernes por Morales y ahora queda redactar su reglamento por consenso, actividad que los dueños de medios, algunos sindicatos de periodistas y un organismo colegiado se niegan a realizar.