Perú: un muerto y doce heridos en dos ataques de Sendero Luminoso

Los dos ataques se produjeron en una misma zona de la región Ayacucho, que es parte del VRAE, señaló el ministro de Defensa, Luis Alberto Otárola a medios locales. 
El primero se produjo en la tarde del lunes en la provincia La Mar, Ayacucho, “cuando una patrulla se trasladaba como seguridad de los vehículos del hospital de campaña que habían participado de una acción cívica en el distrito de Santa Rosa”, informó. 
Explicó que “se originó un enfrentamiento con los elementos narcoterroristas” (definición usada por los militares para referirse a la alianza entre grupos remanentes de Sendero con bandas de narcotraficantes) y “como consecuencia resultó muerto el chofer del vehículo, el técnico Leoncio Mendoza, y cinco heridos”. 
El segundo ataque senderista “se realizó cerca del centro poblado de Machente, en Ayacucho, durante las operaciones militares que se vienen realizando en la zona donde fue atacado el convoy militar”, informó en un comunicado el Comando de la Fuerzas Armadas. 
“En el ataque resultaron herido de gravedad por impacto de bala el mayor Víctor Phillips y seis integrantes de la patrulla con heridas leves por esquirlas”, según la nota. 
“El helicóptero fue atacado cuando llevaba a la zona patrullas de Fuerzas Especiales”, indicó la nota militar 
Las fuerzas Armadas continúan desplegando operativos por aire y tierra para capturar a los atacantes. 
El VRAE es una zona donde, en forma esporádica, los grupos a los que se considera remanentes de Sendero Luminoso lanzan ataques a las fuerzas de seguridad. 
En la última acción de ese tipo, el pasado 21 de noviembre, un militar murió y otros dos resultaron heridos en un ataque de Sendero Luminoso a una base contrasubversiva al sudeste de Perú. 
Sendero Luminoso, de orientación maoísta, impulsó una guerra contra el Estado a comienzo de los 80 que dejó unos 70.000 muertos en más de una década. 
La agrupación rebelde fue derrotada a mediados de la década de los 90, pero algunos grupos huyeron y se refugiaron en la espesura de la región amazónica del VRAE y de la selva central, donde subsisten, según las autoridades, dando seguridad a los traficantes en el transporte de cocaína de la Amazonía a la costa. 
Analistas consideran que actualmente Sendero Luminoso tiene unos 300 combatientes en armas. 
La semana pasada, el llamado 'comandante Artemio', jefe de la facción de la selva central, reconoció en una entrevista que Sendero Luminoso había sido derrotado y expresó que sus acciones militares eran eminentemente defensivas.