Salud de Chávez empuja a una crisis institucional en Venezuela

Con el paso de los días y de las horas, la incertidumbre y las dudas en torno a quién estará al frente del Gobierno de Venezuela a partir del 10 de enero se incrementan. De acuerdo con la Constitución de 1999, ese día el presidente Hugo Chávez, quien se encuentra convaleciente en Cuba de la cuarta operación a la que fue sometido en año y medio debido al cáncer que padece, debería asumir el tercer sexenio para el que fue elegido el pasado 7 de octubre.
Sin embargo, su “delicado estado”, según lo han calificado sus colaboradores más cercanos, hace previsible que no pueda estar ese día para prestar juramento ante la Asamblea Nacional, con lo cual se abriría, de acuerdo con juristas, una crisis institucional sin precedentes.
¿La razón? La Constitución de 1999 no establece quién asumirá la Jefatura del Estado en caso de que el candidato electo no pueda tomar posesión, pese a que el vicepresidente Nicolás Maduro aseguró el pasado viernes que este 10 de enero ya Chávez asume su nuevo mandato y que el acto de posesión es un “formalismo” que podrá realizarse después.
“Las faltas temporales y absolutas del Presidente de la República están bien reguladas en la Constitución, lo mismo que la falta absoluta del Presidente electo, pero no dice nada sobre sus faltas temporales. Hay un vacío en la Constitución”, afirmó el abogado constitucionalista Alfredo Romero, quien indicó que esa laguna abre las puertas a una “crisis política y jurídica”.
En similares términos se pronunció el abogado Alonso Medina Rosa, quien indicó que “el presidente Chávez tiene una doble condición, pues es Presidente en ejercicio y electo y resulta que el Artículo 233 de la Carta Magna establece que la falta absoluta del Jefe de Estado electo antes de que asuma su cargo será cubierta por el Presidente de la Asamblea Nacional, pero ese no es el caso ahora, porque el presidente Chávez ni ha muerto, ni ha renunciado, ni ha sido destituido ni ha sido inhabilitado”.
Los juristas demandaron un pronunciamiento de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. En este organismo reposan desde finales de diciembre dos solicitudes para interpretar el Artículo 231 del texto fundamental, el cual estipula que el inicio del nuevo período es el próximo día 10 de enero y que en caso de que no poder asumir su cargo ese día lo hará ante el máximo juzgado.
ES UN FORMALISMO
Pero para el Gobierno no hay ningún tipo de riesgo de que se presente una crisis de gobernabilidad.
El vicepresidente Nicolás Maduro, a quien el convaleciente Mandatario designó como su sucesor antes de partir a Cuba para su nueva intervención quirúrgica, aseguró en la noche del viernes que el próximo jueves se iniciará el nuevo sexenio constitucional para el que fue elegido el líder bolivariano, aún cuando este no pueda posesionarse.
“El Presidente ha sido reelecto por voluntad de la mayoría nacional. Es el Presidente reelecto y la Constitución establece como un formalismo que debe prestar juramento el 10 de enero, pero él continua en sus funciones y se establecerá en cualquier momento cuándo tomará posesión”, afirmó durante una entrevista que le realizó el ministro de Comunicación, Ernesto Villegas.
Durante la conversación, Maduró aseguró que: “La interpretación que ha venido dándose es que el período arranca el 10 de enero, y el formalismo de su juramentación y podrá resolverse ante el Tribunal Superior de Justicia cuando así lo organice junto al comandante (Chávez)”.
Días atrás esta tesis ya fue adelantada por la presidenta del máximo juzgado, magistrada Luisa Estella Morales, quien tiene una de las dos solicitudes de interpretación que reposan en la Sala Constitucional. No obstante, la misma contradice abiertamente la jurisprudencia de ese organismo.
“El inicio de la acción de Gobierno depende de la correspondiente toma de posesión”, declaró en mayo del 2009 la Sala Constitucional del alto tribunal al resolver un conflicto que se presentó con la asunción de un gobernador, lo que contradice abiertamente lo expuesto hace un par de días por el vicepresidente Nicolás Maduro.
“Resulta patente que el acto de juramentación del Jefe del Ejecutivo constituye una solemnidad imprescindible para la asunción de la magistratura estatal y, por tanto, condiciona la producción de los efectos jurídicos de una de las funciones esenciales de los entes político territoriales, a saber, la función ejecutiva del Gobernador electo y, el consiguiente, desarrollo de las facultades de dirección y Gobierno de la entidad”, agregó la intérprete de la Carta Magna en esa ocasión.
Es por eso que la tesis expuesta por el oficialismo fue rechazada por los juristas consultados por El País, quienes recordaron que “el 10 de enero vence el período de este Gobierno, el cual no se puede prorrogar y el Presidente, aunque ciertamente fue reelecto, no puede seguir en el poder sino se juramenta”.
Habrá que esperar qué decide el Tribunal Supremo. Fuentes de ese organismo aseguraron a este diario que la semana próxima se pronunciará. No obstante, vale recordar que ese organismo no ha dictado ningún fallo que contravenga los intereses del Gobierno desde el 2003.
SOBRE LAS NORMAS
La Carta Magna de Venezuela dice que si el presidente fallece antes de su posesión, quien asume las riendas del país es el jefe de la Asamblea Nacional mientras se convoca de nuevo a elecciones.
En caso de que el Mandatario se llegue a posesionar y su ausencia absoluta se dé después, será el vicepresidente quien deba gobernar de forma interina mientras se hace el llamado a elecciones, 30 días después de la ausencia.
En caso de que al presidente le falten menos de dos años, el vicepresidente deberá concluir el periodo.
MADURO DICE QUE TRATAMIENTO DE CHÁVEZ REQUIERE TRANQUILIDAD
El vicepresidente de Venezuela dijo este sábado que el tratamiento que sigue el presidente Chávez, tras su más reciente operación amerita tranquilidad, y señaló que en los próximos días el Gobierno informará de la evolución de la crisis respiratoria que le afecta.
"En los próximos días seguiremos informando de las condiciones, de cómo evoluciona el tema respiratorio que tiene nuestro comandante. Ustedes saben que son tratamientos que ameritan tranquilidad y nosotros estamos tranquilos y le pedimos al pueblo que tenga confianza, seguridad, serenidad", exhortó en un discurso.
Además de pedir que se confíe en la información oficial y se descarten las olas de rumores sobre el asunto, el vicepresidente y ministro de Exteriores también pidió unidad popular para encarar otros asuntos, entre ellos una "campaña de desabastecimiento" de alimentos, que dijo ha sido detectado por el Gobierno.
"Se crea una cadena de nerviosismo y no hay quien la aguante", señaló tras asegurar que la red estatal de alimentos cuenta con reservas alimenticias suficientes para atender tres meses de la demanda nacional.
El Gobierno ha venido defendiendo en los últimos dÍas su polÍtica comunicativa sobre la enfermedad de Chávez asegurando que ha difundido 27 reportes desde el pasado 11 de diciembre.