Desde la mañana de este 17 de diciembre están en San Andrés, tal como lo anhelaban, los siete miembros de la familia Duffis, quienes se vieron obligados a pasar la noche del viernes para sábado, en un rincón del Aeropuerto Rafael Núñez de Cartagena.
La razón es que la aerolínea Wingo en la que debían viajar la mañana del viernes, les negó a los padres la alternativa de llevar en brazos a la menor de sus cinco hijos, la pequeña Aida Duffis, de 2 años y 2 meses, durante el vuelo de casi una hora hasta San Andrés, pues apenas lo permiten con niños hasta los dos años de edad.
Durante al menos 24 horas, Marcelino Duffis y su familia padecieron una difícil experiencia en el terminal aéreo de Cartagena, debido a la situación descrita, y durante ese tiempo se alimentaron un poco con ayuda del personal de la Aeronáutica Civil, ya que el padre no tenía nada de dinero para mitigar las dificultades.
TRABAJADORES COMPRARON EL PASAJE
El tiquete faltante costó 379.990 pesos y fue comprado a Wingo tras una recoleta de plata que hicieron empleados de la Aeronáutica Civil en Cartagena, quienes lo pagaron por Internet con una tarjeta de crédito prestada.
“Ante este dramático caso, nosotros compramos el tiquete, acá tengo la factura de pago, lo adquirimos por Internet porque Wingo no vende tiquetes en su punto de counter en el Aeropuerto, lo importante es que esta familia humilde ya se pudo ir a su destino”, comentó una funcionaria de la Aerocivil, quien por vía electrónica envió a El Universal copia de la factura del tiquete adquirido por ellos.
Marcelino Duffis, desplazado por el hambre y la crítica situación que estaba viviendo en La Guajira desde hace bastante, vendió las pocas pertenencias que tenía en esa lejana tierra para comprar seis tiquetes aéreos y retornar con su familia a su natal San Andrés.
LA AEROLÍNEA
A través de su división de Comunicaciones, la aerolínea Wingo le confirmó a este medio que los Duffis ya habían volado a San Andrés este sábado.
Sobre lo sucedido con esta familia, indicaron que la legislación internacional en materia aeronáutica es rigurosa, y que “las políticas son claras” con los niños muy pequeños, de manera que sólo se permite llevarlos en brazos hasta la edad de dos años.
Reconoció la dureza del tema y ofreció disculpas a la familia afectada y a la opinión pública, por todo lo sucedido.
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