Cartagena


"La Fiscalía nunca tuvo pruebas contra mí": Mery Luz Londoño, exgerente de Etesa

MÓNICA MEZA ALTAMAR

22 de junio de 2015 12:00 AM

La pesadilla que desde el 22 de septiembre de 2010 vivió la exgerente de la Empresa Territorial para la Salud (Etesa), Mery Luz Londoño, terminó.

Tranquila y mostrando su fe en Dios, como dice se mantuvo desde el momento en que la Fiscalía la acusó sin prueba alguna por los delitos de concusión y enriquecimiento ilícito, Londoño aseguró que siempre defendió su inocencia. 

“La Fiscalía nunca tuvo ninguna prueba en contra mía ni en contra de mi esposo, y esa fue la tranquilidad que siempre tuve. Nunca acepté los cargos, nunca tuve que recurrir a ningún principio de oportunidad para obtener algún beneficio o rebaja de pena, porque nunca en Etesa, ni en otros cargos públicos en que me he desempeñado, constreñí o induje a alguien para que me entregara dineros. Siempre tuve la tranquilidad y la fe en Dios de que todo se aclararía”, dijo.

De todas maneras -continuó Londoño- no deja de ser un proceso que le afecte a uno, porque uno siente que tiene un fantasma en la espalda todo el tiempo y que todo el mundo está contra uno.

La exfuncionaria, quien estuvo tres meses en detención intramural, seis más con detención domiciliaria en un apartamento en Bogotá y luego permaneció asistiendo a audiencias de manera periódica, afirmó que con el ánimo de mostrar resultados, “la Fiscalía indujo a personas a hacer declaraciones confusas y sin fundamento”.

Estos falsos testigos eran exdelegados de Etesa, quienes para mantenerse en sus cargos -según la representante de la Fiscalía-, habían acordado con Mery Luz Londoño y su esposo, Raúl Quintana Tatis, la forma cómo solicitarían dinero a los operadores de máquinas ilegales en los departamentos de Cesar, Norte de Santander y Santander.

“La Fiscalía estaba investigando las actuaciones de unos delegados, que eran las personas contratadas para prestar el servicio de vigilancia y control al juego ilegal. Encontró indicios de que algunos de ellos no cumplían con el objeto del contrato y no cerraban los establecimientos ilegales, sino que les recibían una prebenda al propietario para dejarlo funcionar”, contó Londoño.

Agregó que “al momento que capturan a esas personas, pienso yo que con el ánimo de mostrar buenos resultados, la Fiscalía quería las cabezas de los directivos. Entonces les ofrece beneficios a los implicados en esos delitos, a cambio de declarar en contra de personas superiores. Al final tuvo que reconocer que yo nunca había solicitado, ni pedido dinero a esos delegados para mantenerlos en los cargos”.

El fallo que absolvió de los delitos de concusión y enriquecimiento ilícito a Londoño y a Quintana, fue resuelto por el Juzgado 14 Penal del Circuito con Función de Conocimiento de Bogotá, y salió a la luz pública el pasado 12 de junio. Ante esta sentencia no procede el recurso de apelación.

AFECTARON MI BUEN NOMBRE
La exgerente de Etesa trabaja ahora en la estructuración de proyectos de ingeniería. No obstante, lamenta que su buen nombre haya quedado afectado por semejante embrollo.

“Me armaron semejante escándalo, endilgándome una serie de conductas ilícitas sin tener pruebas, y afectaron mi buen nombre, que es el mayor capital que tiene uno, porque he trabajado toda la vida en forma seria y correcta”, dijo Londoño.

Señaló que en reparación a este daño, le gustaría que la Fiscalía le pidiera perdón en público. “Lo estamos evaluando, además fue una situación que causó una afectación económica muy alta, porque en el momento en que a nosotros nos detienen estábamos manejando un proyecto inmobiliario, financiado por un crédito bancario de 4.200 millones de pesos, y cuando a uno le sucede una situación de esas, de alguna manera sufre una condena social”.

Y por esta “condena social”, manifestó que dicho proyecto “terminó siendo manejado por una persona que había puesto el banco, y no es lo mismo que administre el mismo dueño, que cuida cada peso para que los resultados se den, a que lo administre otro que realmente no es doliente y no le preocupan tanto los resultados. Eso terminó reflejándose en que el proyecto no dio las utilidades o tuvo sobrecostos, entonces sí nos afectó mucho en lo económico”.

Pero, ¿qué intereses había detrás de esta mentira? Londoño sostiene que “estando en Etesa me tocó tomar decisiones administrativas que tenían un costo político para algunos grupos, me tocaba despedir y suspender contratos a quienes no estaban haciendo las cosas bien, eso generó malestar”.

Para su fortuna, fue exonerada de toda culpa. “El Señor permitió que todo se aclarara. Uno siente cuando está en un proceso de esos que toda la justicia está en contra de uno. Cuando a mí me detuvieron y me llevaron a Bogotá no había nada. Una juez decía “esta señora es un peligro para la sociedad y maneja una banda de delegados en cada departamento”, y la Procuraduría y la Fiscalía aseguraban que tenían pruebas, pero me fui con la tranquilidad de que iba a regresar y me decía, esto se tiene que aclarar, y así fue”.

Se ha producido un error al procesar la plantilla.
Invocation of method 'get' in  class [Ljava.lang.String; threw exception java.lang.ArrayIndexOutOfBoundsException at VM_global_iter.vm[line 2204, column 56]
1##----TEMPLATE-EU-01-V-LDJSON----
 
2   
 
3#printArticleJsonLd()
 

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS