Cansados del desmesurado y desordenado aumento de edificaciones sin planeación urbanística, los vecinos de Manga, Bocagrande, Castillogrande y El Laguito decidieron interponer una acción popular para que se ordene al Distrito tomar las medidas necesarias para impedir que este problema siga empeorando.
Con este mecanismo pretenden proteger los derechos colectivos de las comunidades de esos barrios en los que, según los residentes, ha decaído la calidad de vida por la construcción descontrolada de edificios.
La acción popular fue firmada por los presidentes de las Juntas de Acción Comunal de Manga, Julio Romero Alandete; Castillogrande, Jesús Puello; y El Laguito, Lidia Patricia Zablasky. Fue presentada al Juzgado Tercero Administrativo de Cartagena el jueves pasado.
“Hay un desorden urbanístico impresionante y la idea es que se puedan corregir esos errores para planificar la ciudad como es debido. Hay demasiadas construcciones”, aseguró Jesús Puello Hincapié, presidente de la JAC de Castillogrande.
Los accionantes pretenden que se suspenda de la expedición de nuevas licencias de construcción hasta que se generen las condiciones que lo permitan y manifestaron que con esto quieren hacer un llamado a las autoridades para que emprendan acciones efectivas ante la grave situación de ordenamiento territorial.
Otros problemas
Otros aspectos que contempla la acción popular y que están relacionados con el crecimiento urbanístico son: la movilidad debido a la falta de vías de acceso, el alcantarillado sanitario que está saturado en esos sectores y que se evidencia con rebosamientos frecuentes de aguas residuales; la falta de drenajes pluviales que ocasiona inundaciones constantes cuando llueve o aumenta el nivel del mar; la falta de protección costera para impedir que el agua de mar llegue a las calles, la contaminación ambiental de la bahía, la invasión del espacio público y la alta densificación en los barrios.
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