Cartagena


Aquí el progreso es un dolor

REDACCIÓN CARTAGENA

27 de enero de 2010 12:01 AM

Las tres grandes preocupaciones de los habitantes del barrio El Recreo son la ocupación del espacio público, el deterioro de sus calles y las construcciones ilegales. Aún así, para los visitantes, El Recreo no deja de ser uno de los mejores barrios de lo que se ha dado en llamar “La Nueva Cartagena”, debido a la amplitud y belleza de sus viviendas, como también las calles pavimentadas y el aire de tranquilidad que algunos dicen percibir cuando por allí pasan. Para los viejos fundadores, los tiempos pasados fueron mejores: aunque la mayoría eran provenientes de los barrios más antiguos de Cartagena, en El Recreo se respiraba el ambiente pueblerino de las haciendas que lo precedieron. Ahora están preocupados por algunos brotes de inseguridad, por lunares de contamina-ción ambiental y por el auge comercial de la Carretera Troncal de Occidente, en donde po-dría decirse que comienza el barrio; y en donde, desde hace años, surgieron negocios de dis-tintos renglones que ya le imprimieron otra cara. Todavía las calles se ven impecables en cuanto a pavimentación, pero la Junta de Acción Comunal, presidida por Rafael Cortina Martínez, intenta prender las alarmas respecto al de-terioro que están sufriendo algunas por causa de los buses y camiones que por allí trafican. Debido a que El Recreo se encuentra entre la Troncal de Occidente y la antigua carretera del barrio Ternera, sus calles sirven como vías de evacuación en cuanto se presentan tranco-nes en cualquiera de las referidas arterias viales. “Si se arma una huelga de buses en la Troncal, entonces los carros cogen nuestras calles para salir a la vía de Ternera; y si se arma un trancón en esta última, también las utilizan para evadirse por la Troncal”, explica Cortina con cierta sombra de preocupación. El mal de las calles A parte de las intervenciones de vehículos ajenos al barrio, los trabajadores comunales tie-nen plenamente identificadas otras molestias que se les están anidando. Dicen que en la Calle Primera, el espacio público viene siendo ocupado descaradamente por negocios particulares y, aproximadamente, seis estaciones de taxis sin autorización distri-tal, “y lo peor es que a altas horas de la noche, y en la madrugada, manejan salvajemente, sin importarles que la mayoría de los peatones son personas de la tercera edad”, dicen los de la JAC. En la Avenida Primera con Calle Séptima, hay un box coulvert destapado que, según los habitantes, podría causar accidentes, ya que se encuentra lleno de malezas y piedras, lo cual fue notificado ante el Establecimiento Público Ambiental de Cartagena (EPA), pero no se han tomado cartas en el asunto. En la Avenida Segunda, con Calle Séptima, está un registro de la empresa Telefónica, que desde 1990 emana agua de un ojo natural, por lo cual los vecinos se han reunido varias veces con las autoridades correspondientes sin que se presente la solución definitiva. En cuanto a ocupación del espacio público, los vecinos afirman que en la Calle Cuarta hay un callejón ciego que está en peligro de ser ocupada por comerciantes, como sucedió al final de la Calle Octava, que finalizaba en la antigua carretera de Ternera, pero fue obstruida por un comerciante para abrir una ferretería. En ese mismo sector, un espacio perteneciente al barrio, el cual podría convertirse en par-que infantil, está siendo tomado por particulares como parqueadero de volquetas. A lo anterior, se suman preocupaciones de corte ambiental como el vertimiento de aguas servidas que algunos vecinos hacen a las calles, lo mismo que los montones de podas de ár-boles en las esquinas y la deposición de escombros y basuras en un solar que hace frente con el barrio. “Ese espacio —dice Rafael Cortina— pertenece a la empresa ‘Álvarez y Collins’. Allí los carromuleros echan sus desperdicios. Cuando la brisa corre fuerte, no podemos con los malos olores y el terrero. Se le ha comunicado a la inspección y demás autoridades, y nada cambia”. Educación y recreación El Recreo cuenta con jardines infantiles y planteles de educación primaria y secundaria de carácter privado, los cuales, según los propios vecinos, “llenan las expectativas de los padres de familia”. “Este año —anuncia la JAC— nos hemos comprometido, mediante nuestro comité de Educación, a programar charlas educativas para jóvenes y adultos, como también cursos en diversas áreas convenidas con el Sena y las entidades que quieran colaborarnos”. En la parte deportiva y recreativa dicen tajantemente que “nos rajamos: tenemos una can-cha múltiple que sólo se utiliza para microfútbol. Pero habitantes de los barrios vecinos las ocupan y destruyen las dotaciones, porque carecemos de vigilancia permanente. Por enésima vez pedimos el apoyo de la Alcaldía Local en este sentido”. Asimismo reconocen que a la JAC le ha faltado organizar un comité que programe activi-dades deportivas y culturales, “pero por el momento estamos solicitándole al Ider que nos envíe un coordinador de ejercicios aeróbicos para involucrar a toda la comunidad”. En lo que concierne a parques, el barrio cuenta con dos: uno frente a la iglesia y otros en el sector Valencia, “ambos mal asistidos por la comunidad”, aseguran los líderes comunales. El primero fue apadrinado en 2009 por la empresa Iluminemos S.A., “pero ahora algunos vecinos se oponen a su readecuación, tal vez porque está sirviendo de refugio para las parejas de enamorados”, dice la JAC. “El de Valencia con Calle Sexta —explican— fue parcialmente recuperado por algunos vecinos en 2007, pero se han reservado su uso. Por eso lo mantienen cerrado y con candado”. Doña Helga, presencia ilustre Por su dedicación al frente del Centro de Educación El Recreo, Helga Briceida Saballet, es considerada un personaje ilustre. Desde hace 30 años su familia ha administrado el colegio con lujo de detalles, como lo afirman los miembros de la Junta de Acción Comunal. De su madre heredó la rectoría, cargo al que llegó precedida de títulos universitarios en carreras como Economía y Administración Educativa, y de especializarse en Gerencia de la Educación. Hoy lleva 18 años liderando la institución; y, con gozo, recuerda cómo empezó a forjar una empresa familiar que en la actualidad se ha convertido en la carta de presentación para el barrio. “Me acuerdo que iniciamos con 5 niños. Poco a poco, ganamos la confianza de los padres y así el colegio fue creciendo, hasta el punto que hoy en día contamos con 430 estudiantes”, manifiesta. Señala que el Centro de Educación tiene prestigio por su nivel académico calificado por el ICFES como muy superior. La formación que imparte es reconocida, por lo que cuenta con alumnos de distintos ba-rrios de la ciudad y no sólo de El Recreo, como se cree popularmente. “La gente me aprecia porque he influido en la preparación de sus hijos; y, además, porque siempre digo sí a las actividades comunitarias. Agradezco que me hayan tenido en cuenta pa-ra designarme como un personaje ilustre. Esa clase de gestos animan a seguir trabajando a fa-vor del bien común”, expresó la señora. Cuenta que lo que más la enorgullece es ver a muchos de los que fueron sus estudiantes convertidos ahora en profesionales exitosos y con sentido de pertenencia por el colegio y el barrio.

Se ha producido un error al procesar la plantilla.
Invocation of method 'get' in  class [Ljava.lang.String; threw exception java.lang.ArrayIndexOutOfBoundsException at VM_global_iter.vm[line 2204, column 56]
1##----TEMPLATE-EU-01-V-LDJSON----
 
2   
 
3#printArticleJsonLd()
 

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS