En los andenes de la Avenida Venezuela del Centro Histórico se consigue desde un alfiler hasta brujos que curan el mal de amores.
Un “ejército” de vendedores informales se ha tomado en las últimas semanas las zonas peatonales de esta vía en la que cada vez hay menos espacio para caminar.
Las advertencias del Distrito y la Policía no preocupan en lo más mínimo a los comerciantes callejeros, quienes parecen inmunes a la aplicación de la ley, pese a estarla violando flagrantemente.
Zapatos, ropa, velas, relojes, cuadros, frutas, comida y minutos a celular son algunos de los productos y servicios que se ofrecen en las aceras de esta arteria vial en la conviven el desorden y la falta de autoridad.
Lejos de pensar en su retiro de los andenes, los informales alcanzan grados de sofisticación que sorprenden, ya que muchos de ellos usan ahora micrófonos y parlantes portátiles con los que promocionan a todo pulmón sus productos.
Esta situación genera doble afectación a los peatones, quienes además de no poder moverse cómodamente deben soportar el ruido ensordecedor de las ventas callejeras.
No contentos con la invasión de áreas comunes, algunos informales parquean vehículos repletos de mercancía en plena vía, donde los venden sin pudor y al parecer sin temor a ser sancionados por las autoridades de tránsito o policía.
Estos carros son los mismos que El Universal y la ciudadanía ha denunciado reiteradamente pero que al parecer las autoridades ya se cansaron multar.
La situación amenaza con agravarse, dado que apenas comienza la temporada de ventas de fin de año, la cual es aprovechada por muchos invasores de espacio público para hacer su “agosto”.
“TODOS TENEMOS QUE PONER”
Adelfo Doria Franco, gerente de Espacio Público y Movilidad Urbana, asegura que “si hay vendedores ambulantes en la Avenida Venezuela es porque también existen los compradores. Aquí todos tenemos que poner de nuestra parte, esta es una avenida que costó mucho recuperar no sólo en dinero sino también en esfuerzo”,
“Aquí había más de 450 personas con confianza legítima y eso salió del bolsillo de todos los cartageneros. Nosotros entendemos la situación difícil del país, pero bajo ninguna circunstancia en un espacio público recuperado pueda haber una segunda negociación ya que esto riñe con el espíritu de la ley”, agrega el funcionario.
Doria afirma que aunque algunos de los nuevos ocupantes le han solicitado que los deje trabajar hasta fines de este mes, esta posibilidad es inviable dado que es un espacio público recuperado.
El Gerente de Espacio Público asevera que “Todos los vendedores que se encuentran en la Avenida Venezuela son nuevos, los reubicados se encuentran en sus sitios pactados dentro la ley y solo entre 4 y 5 casos están pendientes para ingresar en el Edificio Decor y su reubicación está prevista para el 2 de enero del 2011”.
El funcionario advierte que en los próximos días se intensificarán los controles policiales en esta avenida “y en esta ocasión no será solo advertencia sino que se decomisará la mercancía hasta el próximo año y se aplicarán sanciones drásticas para reinvasores y nuevos ocupantes ilegales”.
SE MUDAN AL NUEVA COLOMBIA
Luego de más de seis meses de haber sido inaugurado, el Centro Comercial Nueva Colombia (antiguo Edifico Decor) de la Avenida Escallón, en el Centro, recibió a los primeros vendedores que iniciarán su proceso de formalización.
Los comerciantes están acondicionando sus puestos de venta y se prevé que empiecen a vender antes de que termine esta semana.
Cabe anotar que la reubicación de vendedores en el Nueva Colombia tardó debido a que el edifico tenía filtraciones de agua y además se estaban construyendo rampas para facilitar el acceso a discapacitados.
Adelfo Doria, gerente Espacio Público, dice que “los comerciantes han llegado al centro comercial por voluntad propia pero otros han decidido esperar hasta enero para mudarse y adecuar sus puestos. A todos los apoyaremos”.
El Centro Comercial Nueva Colombia tiene 160 módulos de venta distribuidos en tres niveles, según sus productos y servicios.
Doria asevera que: “Una vez esté listo y en funcionamiento el edificio, no debe quedar ni un vendedor en la Avenida Escallón y las calles Del Boquete, La Cruz, La Moneda y Primera de Badillo”.
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