Basta de retrasos en las obras del Parque Román

Se reiniciaron las obras de la fase final del Parque Henrique Luis Román, en Manga, y se espera que no haya más dilaciones para la terminación de este proyecto.
La ingeniera civil Karol Osorio Degeovanni, representante del Consorcio Parque Román, admite que ha sido mucho más la demora en papeleos y trámites legales para este proyecto recreativo, que el tiempo invertido para ejecutarlo por completo.
Las obras pendientes básicamente corresponden a acabados y estructuras menores. Esto debe estar terminado en 75 días o antes, lo que equivale a conjeturar que el parque estará dado al servicio a mediados de mayo.
Cumplidos los requisitos legales para la etapa final de esta obra, “nos dieron la autorización hace poco para retomar los trabajos, lo cual estamos haciendo semana, y de hecho en los últimos días hemos estado repasando detalles para no sentir tanto el paso del tiempo con el proyecto paralizado”, manifestó Karol Osorio.
En los días finales de febrero pasado los trabajadores del Consorcio Parque Román, constructor del parque, estuvieron haciendo limpieza general al área de obras y le han suministrado abono a la tierra donde están sembrados los árboles nuevos, para ayudarlos a afianzarse al medio.
“Todo el tema legal quedó prácticamente arreglado para hacer lo que falta”, reitera la ingeniera.
ALTERNATIVA ESPERADA
El Parque Román y la cancha multifuncional del sector Las Colonias son los únicos espacios públicos con acceso libre que tendrá Manga para entretenimiento de la comunidad, pues los demás escenarios que existen en el barrio, por cierto muy pocos, están en manos privadas, y solo se accede a ellos pagando el servicio por horas.  
Para terminar este proyecto deportivo y recreativo con sus debidos acabados, el Gobierno Distrital dispuso a través del Ider, de una adición presupuestal de por lo menos 400 millones de pesos a fin de dejarlo completamente listo.
Las obras fueron suspendidas en diciembre del 2012, pues para entonces ya habían sido ejecutadas todas las tareas presupuestadas en el contrato inicial por 1.155 millones 346 mil pesos.
El predio donde se construye el Parque HL Román tiene 7.536 metros cuadrados.
CAMINO RECORRIDO
El Parque HL Román y sus dos canchas deportivas son el resultado de un contrato interinstitucional de obra pública firmado a mediados del año 2011 para su remodelación y adecuación.
De tal manera, el 28 de junio del 2011 se suscribió un “convenio de asociación interinstitucional” entre el Instituto de Deporte y Recreación (Ider), la Universidad de Cartagena, Fundación Electricaribe y el Club de Pesca, precisando los correspondientes aportes de dinero.
Las obras fueron adjudicadas el 4 de noviembre del 2011 al Consorcio Parque Román (conformado por las firmas Ángel Rincón Barón y Cía Ltda, y Obras, Maquinarias y Equipos 3A S.A.S), por valor de 1.155 millones 346 mil 396 pesos, tras un proceso licitatorio.
Desde entonces los trabajos fueron intermitentes por diversas circunstancias políticas y legales. Un año después de convenir la participación económica para su materialización, la obra  quedó atrapada en una nebulosa, cuando el proyecto fue embestido por una lluvia tempestuosa de comentarios acalorados.
Esa inflamada polémica se suscitó al revelarse que los recursos inicialmente estimados de $1.155 millones no bastaban para terminar el proyecto, ya adjudicado para entonces, pues quedarían pendientes ciertas obras, además necesarias en el propósito de contar con un parque en adecuadas condiciones de funcionamiento.
El tema ardió más cuando la organización comunal de Manga reclamó para los ciudadanos el uso libre del parque y sus canchas, pues la Universidad de Cartagena controvirtió lo anterior recordando su calidad de propietario sobre el lugar. El Concejo Distrital fue uno de los escenarios de esta batalla verbal, el 11 de julio del 2012.
La disponibilidad presupuestal que se necesita para lo que falta del proyecto fue avalada a principios de este año (2013), con lo cual parece terminar el accidentado camino que ha recorrido este proyecto con fines recreativos.