La Capitanía de Puerto de Cartagena y el Establecimiento Público Ambiental (EPA) informan que la medida de emergencia tomada por los bomberos fue adecuada, porque de esa manera se disminuyó el impacto ambiental que pudieron haber, ya que el cloro gaseoso en el aire es más tóxico.
Tras una inspección se determinó que el cuerpo de agua se encuentra en condiciones normales.
“Los bomberos hicieron lo que técnicamente era la mejor opción, que fue arrojar al mar el cilindro, porque así debió manejarse la emergencia para disminuir impactos ambientales”, explica Gabriel Luna, biólogo marino del EPA Cartagena.
“Luego de 24 horas de haber sido arrojado el cilindro al agua, encontramos una situación normal”, expresa por su parte Juan Francisco Herrera Leal, capitán de Puerto de Cartagena.
“El cilindro, con cloro gaseoso al 10%, no tenía válvula y fue sumergido en el agua a 10 metros de distancia de la tierra, para evitar que siguiera emanando gases y afectara la salud de las personas que circundan el área”, explica teniente Aníbal Guerrero Torres, director operativo del Cuerpo de Bomberos.
La Bahía, vigilada
Le corresponde a la autoridad ambiental de Cartagena, el EPA, verificar la situación de alerta surgida con el cilindro de gas y seguir monitoreando, a fin de que no vuelvan a repetirse incidentes de este tipo, según precisión del capitán de Puerto, Juan Herrera Leal.
El EPA por su parte indica que el Decreto 321 de 1999 ó Plan Nacional de Contingencias, establece como prioridad máxima para las labores de respuesta, la protección de la vida humana, y en este sentido la actuación del Cuerpo de Bomberos se ajustó a las normas ambientales.
La Capitanía de Puerto y los Guardacostas habían restringido la actividad de pesca en la Bahía de Las Ánimas por un lapso de 24 horas, luego de conocerse los hechos.
Peces muertos
Según el biólogo del EPA, Gabriel Luna, el impacto causado por el gas cloro bajó eventualmente el pH del agua (pH es un indicador que expresa el grado de acidez o alcalinidad de una disolución y está determinado por el número de iones libres de hidrógeno en esa sustancia), pero se recuperó en cuestión de minutos.
Por esa situación hubo muy pocos peces muertos, es decir por el descenso del pH o por habérsele quemado los tejidos o las branquias a los animales.
Fue un impacto muy reducido frente a cualquier otro que pudiera darse de no haberse tomado las decisiones correctas, explica Luna.
“El cloro es un gas ácido que reacciona con el agua de mar bajando su pH y por eso se tornó una mancha de color verde alrededor del escape donde burbujeaban los residuos de gas”, explica Gabriel Luna.
El cilindro que tenía bastante tiempo de estar almacenado como chatarra en los patios de la estación, será entregado a una empresa especializada en manejo de cilindros con este tipo de gases.
Maleza en la Bahía
Otro fenómeno ocurre en las Bahía de Las Ánimas por estos días, ya que las corrientes marinas están arrastrando hasta el Muelle Los Pegasos, algas, maleza y otros materiales de desecho arrojados al mar, como botellas de plástico, por ejemplo.
Ante eso el consorcio de aseo Pacaribe reaccionó ayer y con sus operarios empezó la limpieza el sector.
Cartagena
Cloro se diluyó en la Bahía sin causar daño
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