Contratista de tramo Bazurto acusa a Distrito y Transcaribe de demora en obras

El Consorcio Cartagena 2010, constructor del tramo 5A de Transcaribe, que va de Bazurto a La Popa, acusa al Distrito y a Transcaribe de haber incumplido con la entrega de predios y espacio público en esta zona, lo cual ha derivado en demoras en las obras que se suponen debían terminar el 15 de diciembre de este año.
El contratista asegura que esta situación le ha traído problemas financieros y de imagen graves, por lo cual interpusieron una demanda ante el Tribunal de Arbitramentio de la Cámara de Comercio de Cartagena, con la cual buscan una indemnización de $12.860 millones.
Lo cierto es que a 13 días de que se venza el plazo oficial de 12 meses dado a esta firma, las obras en este trayecto vial de 1,4 kilómetros solo tienen un 30 por ciento de avance, es decir, lo que en el papel debían llevar en marzo de este año.
RESPONSABILIDADES
Juan Carlos Román Ospina, vocero de esta constructora, explica que de una parte Transcaribe ha incumplido con la entrega y demolición a tiempo de los predios que se requieren para la realización de los trabajos, y de otro lado el Distrito no ha terminado el retiro de los vendedores informales que ocupan la zona de obras en Bazurto.
“Cuando ganamos la licitación Transcaribe nos dijo que íbamos a tener a disposición tanto los predios como el espacio público a más tardar el 15 de diciembre de 2010, pero evidentemente esto no se ha cumplido y aún está pendiente la demolición de 36 predios y el retiro de los comerciantes callejeros de Bazurto, es decir, lo más crítico”, agrega.
Según el Consorcio Cartagena 2010, compuesto por la firma española Assignia Infraestructuras S.A. y la colombiana Concretos Asfálticos de Colombia S.A. (Concrescol S.A.), estos factores influyen en que no haya continuidad ni constancia en el trabajo y se proyecte la imagen a la ciudadanía de que el contratista tiene las obras abandonadas.  
SIN FECHA FINAL
El ingeniero español Ángel Tascón Blanco, representante legal de este consorcio, dice que es obvio que la construcción del tramo 5A no va terminar en el plazo oficial que vence el 15 de diciembre de este año, y advierte que si no se solucionan los problemas mencionados ni siquiera concluirían en el 2012.
Tascón aclara que la intención de la constructora es terminar cuanto antes el trayecto vial y asevera que “de resolverse los inconvenientes prediales y de espacio público que nos permitan tener a disposición todas las áreas por intervenir, podríamos terminar los trabajos en nueve meses porque tenemos la capacidad técnica y financiera para hacerlo”.
El Consorcio Cartagena 2010 agrega que a los inconvenientes para avanzar en los trabajos se suma el hecho que ni comerciantes ni peatones respetan las zonas de cerramiento de obras, y por el contrario rompen la polisombra y caminan junto a maquinarias pesadas, lo cual puede desencadenar una tragedia en cualquier momento.
Así las cosas, el futuro de las obras del tramo 5A es más incierto que nunca, teniendo en cuenta que quedan por delante obras de envergadura como la demolición de la ‘Loma de Bazurto’, que dadas las circunstancias expuestas por el contratista, su intervención no empezaría en enero de 2012, como ha dicho Transcaribe.
Advierte Ángel Tascón que antes de intervenir esta estructura deben darse las condiciones para poder desviar el tráfico que viene del Centro por la transversal que une a las avenidas Pedro de Heredia y Crisanto Luque, y al que viene del sur de la ciudad con conexión a las avenidas Pedro Romero y Pedro de Heredia.
DEMANDA MILLONARIA
Tal como ocurrió con los contratistas de los tramos 1 y 2 de Transcaribe, el Consocio Cartagena 2010, ejecutor del tramo 5A, ha interpuesto una demanda ante el Tribunal de Arbitramento de la Cámara de Comercio de Cartagena, para exigir al Distrito y a Transcaribe el pago de recursos adicionales a los $29.901 millones fijados cuando se firmó el contrato de ejecución de obras.
La constructora colomboespañola estima que los sobrecostos generados por la realización de obras adicionales, y retrasos en trabajos por causas que ellos imputan al Distrito y Transcaribe, ascienden a $12.860 millones, que podrían ser más al momento de la liquidación del contrato.
Marcela Monroy Torres, abogada de la constructora del tramo de Bazurto, explica que con la demanda se pretende una indemnización por los daños financieros y de imagen que ha sufrido el consorcio, y además lograr una revisión del contrato por parte de Transcaribe, para que se ajuste a la realidad de la obra.
A la pregunta del porqué hicieron una propuesta con un precio tan austero (casi $30.000 millones), si las obras requerirían una inversión más cuantiosa, el ingeniero Ángel Tascón responde que esa cifra era suficiente para atender las obras y obtener utilidades, pero ante la dilación en el proceso de demolición y despeje de las zonas para poder trabajar en ellas, se generaron sobrecostos, pues a los obreros hay que pagarles trabajen o no, lo mismo que el alquiler de las maquinarias, entre otros aspectos.
Cabe recordar que el Distrito ya fue obligado por el Tribunal de Arbitramento de la Cámara de Comercio de Cartagena a pagar más de $15.117 millones a los contratistas de los tramos uno y dos de Transcaribe, tras decisiones proferidas entre abril y agosto de este año.
DISTRITO RESPONDE
Adelfo Doria Franco, gerente de Espacio Público de Cartagena, considera que el contratista del tramo de Bazurto, de Transcaribe, está tratando de justificar su incumplimiento.
Asegura que “lo que el contratista del tramo 5A de Transcaribe ha tratado de hacer es tender una cortina de humo sobre su incapacidad técnica y operativa para realizar las obras con la celeridad y eficiencia que la ciudad esperaba”.
“Contrario de lo que se diga –añade–, el Distrito de Cartagena sí ha cumplido con la entrega de las áreas que en su momento fueron requeridas para que el contratista trabajara. La ciudad es testigo que desde hace meses la zona entre Hielo Imperial y Pie de La Popa está disponible para la intervención que hoy hacen, pero sin maquinaria, sin personal suficiente y sin dobles turnos. No vemos cómo piensan terminar”.
El funcionario afirma que además se le entregó despejado el solobús y la zona de San Andresito para la implementación del Plan de Tráfico.
“El contratista pretendía que le entregáramos la zona de andén contigua a Bazurto para supuestamente trabajar, pero no lo hicimos hasta que nos mostraran un plan de trabajo coherente, porque es absurdo pretender abrir zanjas en una zona, cuando en la otra orilla ni siquiera se ve voluntad de avanzar. Por eso les exigimos que primero terminaran la calzada de La Quinta y luego avanzaran en la de Bazurto. No me quiero imaginar el caos que en pleno diciembre tendríamos con zanjas, maquinaria y gente medio trabajando en ambas zonas”, precisa Doria.
NO RESPONDE EN PRENSA
Enrique Chartuni González, gerente de Transcaribe, asegura que la discusión sobre el contrato del tramo 5A de Bazurto no debe darse en medios de comunicación y por eso se abstiene responder sobre el tema.
CIUDADANOS, LOS MÁS AFECTADOS
Más allá de las discusiones del Distrito, Transcaribe y el contratista, los más afectados con la demora en las obras son los comerciantes, peatones, conductores y ciudadanos en general, para los que estos trabajos son un ‘karma’ que deben enfrentar cada día.
El Universal consultó a algunas personas sobre lo que piensan de las obras del tramo de Bazurto:
ANTONIO DE ÁVILA
Peatón
“Tal como van las obras parece que no van a terminar antes de 2015 porque este contratista parte en un lado, salta a otro y total nunca terminan nada”.
ELKIN VIDES
Empleado de almacén
“Las ventas en el comercio se han bajado más del 50 por ciento porque es muy poca la gente que quiere venir a los negocios con tanto polvo, ruido y escombros. Ojalá terminen antes de que nos quebremos”.
ERIBERTO VILLERITO
Comerciante formal
“La situación para los comerciantes ha estado muy difícil porque son pocas las posibilidades de acceso de la gente a los locales y todo se empeora con las lluvias porque se forman charcos y barro que no dejan caminar”.