Demuelen inmuebles en el tramo cinco B

Varios comerciantes de la Avenida Pedro de Heredia, entre Lo Amador y El Espinal, empezaron a demoler las fachadas de sus negocios para abrirle camino al tramo 5 de Transcaribe, comprendido desde el Puente de Bazurto hasta la India Catalina. Los predios afectados han sido comprados por Transcaribe, y sus propietarios se han encargado de desmontar las estructuras y de refaccionar sus locales, varios metros hacia atrás de donde funcionaron por años. Teniendo en cuenta que en este tramo se concentra cerca del 50 por ciento de la afectación predial del macroproyecto, fue dividido en dos subtramos: uno desde Bazurto hasta la calle que lleva a la subida de La Popa (tramo cinco A), y otro desde La Popa hasta la India Catalina (tramo cinco B). En este último trayecto, según la Gerencia de Transcaribe, hay 10 predios con afectación total, 31 con afectación parcial en fachadas y otros 49 con afectación parcial en terrazas. Inicio de obras Enrique Chartuni González, gerente de Transcaribe, dice: “Los dueños de negocios que ya han recibido el dinero de la venta de sus predios, han invertido la plata en el mejoramiento de los inmuebles, y por eso se notan cambios importantes en estos sectores”. El funcionario explica que las obras del tramo cinco B se iniciarán en agosto de este año y deben terminar un año después, en el mismo mes del 2011. La intervención arrancaría en Chambacú, donde no hay afectación de predios. Esto dará tiempo a los dueños de inmuebles de otros sectores de este tramo, para que hagan las demoliciones respectivas. La ejecución del tramo 5B está a cargo de la firma española Urbe Construcciones y Obras Públicas S.L., y cuesta 29.477 millones 866 mil 590 pesos. Expectantes Los comerciantes de este trayecto de la Pedro de Heredia conocen la experiencia que han pasado sus colegas en otros tramos de Transcaribe, pero en que no se repitan errores y tengan una afectación menor. Mientras unos trabajan en la modificación de sus fachadas, otros cuyos negocios tienen se afectan totalmente, recogen sus mercancías para irse definitivamente de sus locales. Este es el caso de Abigaíl Prieto Causado, administradora Rodamientos del Caribe, en Lo Amador, quien dice que “esta semana cerramos definitivamente el negocio y esto significa que cuatro personas quedarán desempleadas”. “Fueron 14 años de trabajo en este sitio y ahora toca empezar a buscar trabajo por la situación está muy difícil”, comenta la afectada. Para otros comerciantes de esta zona la realización de las obras del sistema Transcaribe es una oportunidad para modernizar sus negocios y ganar clientes, dada la ubicación estratégica de éstos. En lo que sí coinciden es en la exigencia de cumplimiento del plazo previsto para la ejecución de las obras.