La “lluvia” de tutelas que intentan frenar los trabajos del tramo 5A de Transcaribe, entre Bazurto y La Popa, ha generado malestar y desacuerdo generalizado entre los cartageneros.
En una encuesta hecha en www.eluniversal.com.co el 95 por ciento de los votantes dicen no estar de acuerdo con el empleo de este mecanismo judicial para detener estas obras, mientras que un 5 por ciento manifiesta su respaldo a las mismas.
Los foristas son conscientes de que estas acciones amenazan la continuidad de los trabajos y desde luego les afectan directamente ya que las intervenciones durarán más tiempo del previsto y por tanto los inconvenientes de movilidad serán mayores.
Algunos foristas consideran que los jueces locales no deben seguir el juego a los vendedores formales e informales detrás de estas tutelas y piden que se tomen las decisiones pertinentes pero sin afectar las obras del macroproyecto en este sector de la ciudad.
INTERÉS GENERAL
El internauta identificado como Elbore dice que: “No es posible que unos vendedores ambulantes paralicen el desarrollo de Cartagena, eso es inconcebible, pero aunque un juez se preste para este juego el desarrollo de esta ciudad está por encima de todos”.
La medida preventiva del Juzgado 10 Civil Municipal de Cartagena que orden para los trabajos en Bazurto hasta tanto no se defina la situación de varios comerciantes que dicen ser informales, también ha causado polémica en la ciudad.
“Esto es absurdo, cómo se pretende parar una obra que de por sí está súper atrasada, sean serios, no podemos obstaculizar el avance de la ciudad. Siempre pensamos en intereses particulares y no en el general”, opina el usuario Aquilestengo.
Ecos1954 se pregunta: “Qué prima en este tipo de eventos, el interés general de la sociedad, con la construcción y terminación de la vía o el interés de unos vendedores ambulantes particulares, quienes no pagan impuestos y los que lo hacen perfectamente pueden sacrificarse durante el tiempo que dure la construcción de la obra”.
¿QUÉ HACER?
Los cibernautas también tienen sus propuesta para que el Distrito zanje la situación en Bazurto y se garantiza de una vez por todas la continuidad y terminación en los plazos establecido de los trabajos de Transcaribe.
El usuario Rmangonez asevera que “ya hay censos sobre los vendedores que deben ser reubicados y esos deben ser atendidos; los que no aparecen en el censo deben ser retirados si es caso usando la fuerza, meter al menos 200 agentes de Esmad para ver quién puede más, ellos o la autoridad”.
En tono más conciliador Marx Pirstzon dice que “los trabajadores informales de este sector deben ser trasladados a otra zona para evitar el caos y la inseguridad”.
“Hay es que querer a la ciudad para querer y ponerle voluntad a las cosas, si la clase dirigente toma en serio a la ciudad seguramente se encontrarán las herramientas para trasladar, sacar de raíz ese cáncer que lleva años atrasando a la ciudad (Bazurto). Se hacen todos los pasos necesarios, los mecanismos, el dinero, las autoridades cada una ejerce su competencia y recuperamos esa zona”, puntualiza Medusa.
REACCIÓN POSITIVA
Enrique Chartuni González, gerente de Transcaribe, dice que estos resultados y comentarios reflejan que “la ciudad está pidiendo la continuación de las obras, la mejoría de la movilidad, la seguridad en el transporte y la disminución de emisiones de dióxido de carbono (CO2)”.
El funcionario agrega que “sobretodo la ciudad reclama un inmenso ahorro en tiempo para los usuarios, la eliminación del doble pago en transbordos y otros males que afectan el transporte en Cartagena”.
Chartuni afirma que Transcaribe está haciendo un esfuerzo grande para cumplirle a la ciudad y que espera que los fallos judiciales permitan la reactivación de los trabajos en el menor tiempo posible.
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