Despejan “fortín” de la informalidad

Cuando apenas abrían sus negocios y acodaban sus mercancías, 25 vendedores informales fueron retirados de la Carrera 59 de Los Ejecutivos en un operativo realizado ayer por la Gerencia de Espacio Público y la Alcaldía de la Localidad 1. En la diligencia se encontró a un vendedor que supuestamente recibió hace cerca de tres años una compensación para salir de la Avenida Venezuela. El caso será corroborado por el Distrito. Cuatro comerciantes quedaron en zonas peatonales de esta vía: tres fueron amonestados y uno presentó un permiso cuya originalidad está en estu-dio. La zona despejada quedará bajo custodia de la Policía Metropolitana de Cartagena, que tiene el compromiso de impedir la llegada de invasores nue-vos. En el operativo de ayer participaron cerca de 100 agentes de esta institución que no tuvieron que intervenir, dado que no se presentaron alteraciones mayores de orden público. El gerente de Espacio Público, Adelfo Doria Franco, dice que estaba previsto desmontar entre 40 y 45 negocios que funcionaban sin permisos, pero algunos fueron retirados voluntariamente por sus propietarios antes de que se iniciara la diligencia de desalojo. Este caso será corroborado y advierte el funcionario que continuarán las averiguaciones en el sector, toda vez que hay información de otros dos co-merciantes en situación similar. En el operativo también participó personal de Electricaribe que quitó varios metros de cable que era usado por los invasores para conexiones eléctri-cas fraudulentas. ACOMPAÑAMIENTO El alcalde encargado de la Localidad Histórica y del Caribe Norte, Carlos Crismatt Corena, que también participó en el operativo, dice que el sector quedará bajo vigilancia de la Policía para evitar la llegada de nuevos invasores. Crismatt destaca que “fue una diligencia pacífica en la que no fueron atropellados los ciudadanos, sino se defendió el derecho que tienen los cartage-neros de disfrutar el espacio público”. El Alcalde reporta que en la diligencia se levantaron 17 actas de retención de elementos que la mayoría de vendedores se negó a firmar, pero queda-ron como testigos los funcionarios de la Personería y Procuraduría que siguieron de cerca el operativo. Al término de los controles la Carrera 59 quedó casi despejada tras varios años en que los transeúntes caminaban por la vía ante la invasión de los andenes por parte de una cantidad grande de ventas apostadas en las aceras.