En manos del Presidente Uribe suerte de la Gobernación de Bolívar

En manos del presidente Álvaro Uribe está la suerte política de la Gobernación de Bolívar, tras la renuncia del ex gobernador Joaco Berrío, a quien la Procuraduría General de la Nación le confirmó la destitución e inhabilidad por 12 años. La ley dice que el presidente Álvaro Uribe tiene 30 días para aceptar la renuncia de Joaco Berrío, los cuales empezaron a contar desde el viernes 14 de mayo, día en que éste radicó su carta de renuncia en el Palacio de Nariño. En caso de que el Presidente no se pronuncie en los próximos 30 días, se entiende como aceptada la renuncia de Berrío Villarreal. Además de eso hay que esperar a ver si se convoca a elecciones atípicas en Bolívar, para lo cual la Registraduría tendría tres meses para prepararlas. Mientras todo eso ocurre seguiría Jorge Mendoza Diago como gobernador encargado. FALLO DE LA PROCURADURÍA La suerte de Berrío Villarreal se la terminó de sellar ayer la Procuraduría, ente que a través de un comunicado de prensa dio a conocer el fallo de segunda instancia, en el cual lo destituyó e inhabilitó por 12 años por no celebrar de manera oportuna y suficiente los contratos de salud del departamento y las órdenes de prestación de servicios correspondientes. La medida se da a conocer a menos de una semana de que Berrío Villarreal tomara la determinación de renunciar al cargo de Gobernador del Departamento. En el comunicado, señalan que el entonces mandatario departamental incurrió en falta disciplinaria gravísima con culpa gravísima al no suscribir oportunamente, entre enero de 2008 y agosto de 2009, los contratos requeridos para que los ciudadanos accedieran a una adecuada prestación de los servicios de salud de baja, mediana y alta complejidad y las órdenes de prestación de servicios suficientes para la adecuada implantación y seguimiento a las políticas de salud a cargo del departamento. Con su actuación, el ex gobernador retardó el ejercicio de las funciones propias de su cargo, y permitió que se generaran graves riesgos en la salud de los habitantes de Bolívar. “La comunidad desvalida del departamento de Bolívar esperaba que el gobernador acatara su deber funcional garantizando la salud pública y lo que encontraron fue indiferencia frente a su posición de vulnerabilidad, a pesar de contar el ente territorial con los dineros suficientes para cumplir a cabalidad con tal postulado”, concluye la decisión disciplinaria. El Ministerio Público advirtió que contra esta decisión no procede recurso alguno. HABÍA RENUNCIADO El viernes pasado Joaco Berrío había renunciado a su cargo como Gobernador, toda vez que considera estar dentro del tiempo que estipula la ley para que se convoque a elecciones, ya que “la comunidad tiene el derecho de elegir a su gobernante”. Según Berrío Villarreal, de haber esperado más tiempo para renunciar, se corría el riesgo de que la aceptaran después del 30 de junio, lo que haría declinar su propósito sobre las elecciones. Asegura que la manera como se ha manejado el proceso en su contra, así se lo sugiere.