Humedal de La Providencia, sin solución a la vista

10 de noviembre de 2012 12:01 AM
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El barrio comenzó a poblarse hace 16 años, cuando las viejas casas-fincas dieron paso a las construcciones de estilo urbano.
Para ese entonces, por los predios del barrio cruzaba un canal que recogía las aguas pluviales de barrios como La Consolata, El Socorro, Santa Mónica, El Recreo y El Gallo, entre otros, además de que tenía como afluente otro canal proveniente de Los Alpes y sus zonas aledañas, lo cual no presentaba ningún inconveniente, pues las corrientes se evacuaban fácilmente, mediante su curso normal, hacia la Ciénaga de la Virgen.
Pero, según los afectados, los problemas comenzaron cuando las familias que vinieron después decidieron construir sobre el canal, provocando que las aguas provenientes de los otros barrios no encontraran por dónde evacuarse y se empozaran en la entrada de la Diagonal 34, que es la calle más afectada de todas.(LEA: En La Providencia no se detienen las construcciones)
Y en efecto, en este sector de la urbanización, rodeado de juncos y de otras malezas, se fue formando una laguna, que, al principio, era únicamente de aguas pluviales, pero con el paso del tiempo las nuevas viviendas, que carecen de sistema de alcantarillas en un 80%, dirigieron sus tubos de evacuación hacia el humedal, de manera que cuando se precipita un aguacero todas las calles se inundan y los vecinos fundadores deben soportar por varias horas y días los malos olores de las aguas residuales.

Se desvalorizan los predios
Recuerdan que cuando se presentaron las primeras inundaciones, los líderes comunales de ese entonces optaron por elevar quejas ante el Gobierno Distrital en contra de las personas que estaban construyendo sobre el canal, pero  comenzaron a recibir amenazas y las querellas cesaron.
La problemática es ampliamente conocida por la Alcaldía Local 3, la Personería Distrital, la Secretaría de Planeación del Distrito, la Secretaría de Infraestructura del Distrito, la Gerencia de Espacio Público del Distrito, el Dadis, el Establecimiento Público Ambiental de Cartagena (EPA); la Procuraduría General de la Nación y la Presidencia de la República.
La presencia de las aguas putrefactas ha afectado notablemente a la población infantil, que presenta enfermedades de la piel y en el sistema respiratorio, además de que los habitantes han tenido que construir muros en las terrazas de sus viviendas, como también colocar sacos de arena  y puentes de madera para impedir el paso de las corrientes en cada aguacero.
Recuerdan que cuando empezó la construcción del proyecto Transcaribe, las directivas  anunciaron que ayudarían con la pavimentación de la calle principal, para que, por lo menos, los vehículos pudieran ingresar  sin dificultades, pero hasta el momento la vía sigue en pésimas condiciones.
Los vecinos creen que son unas 20 casas las que arrojan sus aguas residuales hacia el humedal; y unas cinco las que están construidas sobre los predios del canal, pero las consecuencias de tales medidas las sufren todos los habitantes, quienes ni siquiera pueden pensar en mudarse, debido a la desvalorización que están sufriendo sus viviendas.
La actual presidenta de la JAC, Maritza Camelo, afirma que la solución a la problemática sería comprar un predio que obstaculiza el paso de las aguas y construir una calle-canal que se conectaría con el canal natural del barrio, después con el Caño Calicanto, que llevaría las aguas finalmente hacia la Ciénaga de la Virgen.
El alcalde de la Localidad 3, Pedro Buendía Elles, contó a El Universal que, en días pasados, funcionarios de su despacho, de Valorización Distrital y del EPA Cartagena visitaron la zona y determinaron que la solución que propone la comunidad es la más acertada en el momento.
Sin embargo, dijo el mandatario, “también persiste el problema de que todavía hay personas rellenando el humedal y vendiendo lotes arbitrariamente, lo que podría empeorar la situación, por lo que estamos investigando para parar ese delito y establecer sanciones”.
Agregó que, en estos momentos, Valorización está conversando con los propietarios del predio que se piensa comprar y haciendo estudios para determinar cuáles serían las especificaciones de la calle-canal que se necesita.

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