Inspector de Policía agrede a periodistas y se arma con segueta

A Blas Hernández Olascuaga no le gustó que periodistas de eluniversal.com.co y Q’hubo le preguntaran por las inquietudes de la comunidad de Almirante Colón que lo señalan de querer apropiarse del inmueble donde tiempo atrás funcionó la inspección de policía de ese barrio.
Una remodelación que en estos días se le está haciendo al predio alertó a la comunidad sobre las presuntas atribuciones que Hernández se estaría tomando sobre el bien.
Hernández,  que actualmente se desempeña como inspector de policía del barrio Ciudadela 2000, respondió airadamente y con manoteo vociferando que eso no le interesaba a la prensa y se armó de una segueta en actitud intimidatoria. Momentos después despojó a uno de los comunicadores sociales de su teléfono celular y sólo accedió a devolverlo ante la presión de la comunidad.
La situación debió ser atendida, en horas de la mañana, por uniformados de la Policía y en presencia de estos, Blas Hernández accedió a responder algunas preguntas a los dos medios de comunicación.
Sellan la obra
Hacia las 3 de la tarde, el alcalde la localidad número 3, Pedro Buendía, se presentó al lugar acompañado de abogados y técnicos de Control Urbano y procedieron a sellar la obra debido a que Hernández no presentó ninguna documentación que ampare las adecuaciones que se está realizando en el predio.
“Al señor se le dieron 5 días hábiles para que presente a la Alcaldía Menor la documentación que sustente que el sitio le fue entregado a él en comodato, tal y como lo está asegurando. Este es un predio del Distrito, ubicado en un área que es para el uso y disfrute de la comunidad lo que lo hace un bien fiscal, el cual imprescriptible e inerbargable”, aseguró Buendía.
Cerca de 300 habitante de Almirante Colón se hicieron presentes durante la diligencia ade-lantada por el alcalde la localidad 3, Pedro Buendía, reclamando la restitución del predio.
“Este es un problema que hay que resolver prontamente porque ya hay un enfrentamiento entre la comunidad y el señor Blas Hernández, quien deberá entender que si este es un predio del Distrito ubicado en una comunidad que ya no quiere su presencia allí, lo mejor es que él se retire”, aseveró Buendía.
El problema
Según lo dicho por el mismo Hernández, él fue inspector de policía del barrio Almirante Co-lón del 2002 al 2010.
Los habitantes de Almirante Colón aseguran que hace años la inspección de policía que fun-cionaba en el inmueble fue trasladada a Blas de Leso y desde entonces Blas Hernández se ha quedado haciendo uso del inmueble para intereses personales y se niega a entregarle el predio a la comunidad.
Las obras de adecuación que adelanta en estos días en el sitio fue lo que prendió el ánimo de los vecinos al desconocer qué entidad dio el permiso y el dinero para estos trabajos.
“Ante todo, él no es habitante de Almirante Colón para que esté haciendo uso de un bien que la constructora de la urbanización le entregó a los residentes para ser utilizado para intereses co-munitarios. Varias veces se le ha pedido entregar el inmueble y se niega diciendo que él tiene permiso de no sé quien para que allí funcione un colegio de abogados. No entendemos quién pu-do haberle dado ese permiso a él a sabiendas que esto es de la comunidad”, dijo Silvia Martínez, residente en el barrio hace 27 años.
Cleotilde Alvarez, vicepresidente de la Junta de Acción Comunal de Almirante Colón, expresó que ella no tiene conocimiento de que a Hernández se le haya otorgado permiso alguno para ha-cer ampliación ni remodelación del lugar. “En días pasados sostuvimos una reunión con el alcalde Campo Elías Terán en la que le expusimos la situación y él nos aseguró que se iba a poner al frente de la situación porque su voluntad es que en este lugar se abriera una casa de la cultura y una sede para brindarle atención a la tercera edad”, expresó Alvarez.
La explicación de Hernández
Según le explicó Blas Hernández a eluniversal.com.co en presencia de la Policía, el 21 de fe-brero de 2006, Javier Tolosa Amaris, que para entonces se desempeñaba como director de Apoyo Logístico de la Alcaldía Mayor de Cartagena, le dio una autorización por escrito para que allí funcionara indefinidamente la sede del Colegio de Abogados Policivistas del Distrito y el Sindi-cato de Pensionados de Inspectores de Policía.
Al preguntarle si esa autorización fue socializada con la comunidad respondió que no.
En presencia de las autoridades, Hernández no mostró ningún documento que ampare las adecuaciones que se le está haciendo al predio y se negó a decir quién o qué entidad está propor-cionando los recursos para que se hagan estas obras.
Opiniones
Darío Medina, habitante.
“Recientemente, Blas Hernández derribó la base donde tradicionalmente se ha izado la bande-ra en el lugar y que al ver esto, los vecinos nos unimos para recolectar fondos y adecuar el frente para darle una mejor vista. Él espero que hiciéramos esto para luego iniciar estas obras”.
Jaime Llorente, habitante.
“Este es un predio de la comunidad, hace tiempo venimos pidiéndole a este señor que nos entregue el sitio para que la Junta de Acción Comunal gestioné la construcción de un parque para los niños, pero él se niega bajo argumentos que no son claros”.
Oswaldo Estrada.
“La comunidad está molesta porque notamos en Blas Hernández un comportamiento paralelo a la comunidad, que es la dueña de este sitio. Mientras los vecinos queremos el lugar para disfrute de los niños, él lo usa para su beneficio y no sabemos quién le ampara esta desición”.