A la cárcel ex gerente de Etesa y su esposo

La ex gerente de Etesa, Mery Luz Londoño y su esposo, Raúl Quintana, no aceptaron los cargos que les imputó la Fiscalía de concierto para delinquir, concusión y enriquecimiento ilícito, pese a ello la Juez 18 de Control de Garantías de Bogotá los envío a la cárcel. Londoño fue remitida ayer en la noche a la cárcel del Buen Pastor, mientras que su esposo fue enviado a la Modelo, ambas en Bogotá. La defensa argumentó que la pareja tiene hijos menores de edad y que la madre del esposo está enferma y a su cuidado, pero ello no motivó a que la juez se abstuviera de dictarle medida de aseguramiento a ambos, al culminar una audiencia que duró casi 9 horas. La Juez determinó que los imputados sí representan un peligro para la sociedad y que aunque tienen dos hijos de 13 y 15 años, los hijos mayores pueden hacerse cargo de ellos, así como de la madre de Quintana, enferma de Alzheimer. El Fiscal 304 Delegado ante el DAS imputó cargos y busca demostrar que tanto Londoño como su esposo “en lugar de destinar el dinero recaudado de Etesa para la salud, lo hacían para el beneficio de particulares”. Según el ente investigador, para 2008 y 2009 obligaron a dos delegados en Cesar y Norte de Santander a cobrarles dinero a los operadores de maquinitas de juegos de suerte y azar para que posteriormente esa plata le fuera entregada a ellos. También indicó que ambos les cobraban a los funcionarios de Etesa ciertas sumas de dinero para que no fueran despedidos. El Fiscal aclaró que aunque Quintana no es empleado público, sí trabajaba junto a su esposa, Gerente de Etesa, y que desde ahí se hacían los cobros irregulares. Por su parte la Fiscalía también aseguró que la gravedad del delito es que el escándalo de corrupción que se originó por presunta responsabilidad de la pareja llevó a que de alguna forma Etesa sufriera detrimento patrimonial y que eso influyera en gran medida en que ahora esté en proceso de liquidación. Los cargos Ninguno de los dos imputados decidió allanarse a los cargos y por el contrario clamaron su inocencia. “No acepto los cargos. Confío en la justicia”, aseguró Londoño, al tiempo que su esposo dijo que “demostraremos nuestra inocencia porque esto ha sido un montaje”. El abogado defensor apeló la detención intramural y tendrá cinco días para presentar sus argumentos a la jueza. Según logró establecer la Fiscalía, tanto Londoño como García presuntamente dirigían y coordinaban las actividades de Jaime Miranda y Alexander Gómez para que estos cobraran impuestos ilegales a los operadores de máquinas de juegos de suerte y azar. “Les dieron tareas específicas para cobrar impuestos y cuotas irregulares”, dijo la Fiscalía sobre el ilícito que se habría cometido durante los años 2008 y 2009. Los dos se habrían enriquecido por más de 180 millones de pesos de forma ilícita producto de esos cobros ilegales. La pareja fue vinculada a la investigación que llevaba el DAS debido a que fueron mencionados por algunos ex funcionarios de Etesa en presuntos hechos de corrupción en dicha entidad. Según la investigación adelantada por el DAS, a través de la operación denominada “Black Jack”, la red de corrupción integrada por funcionarios públicos, contratistas y dueños de juegos de suerte y azar, manipulaban la información para no registrar máquinas que funcionaban en casinos y otros establecimientos, exigiendo un cobro por esa omisión. Según la investigación del DAS, los departamentos de Santander, Norte de Santander y Cesar dejaron de recibir para el sector de la salud, por la explotación de los juegos de suerte y azar, cerca de $2.300 millones. Con esta práctica, de no reportar la operación ilegal de máquinas tragamonedas y otros juegos de suerte de azar, se beneficiaron cerca de 3.900 establecimientos, en esos tres departamentos. Londoño García y su esposo fueron capturados en la noche del martes en Cartagena y llevados inmediatamente a Bogotá y puestos a disposición de la autoridad competente para resolver su situación judicial. Otras capturas anterio-res El pasado 13 de julio de 2009, el DAS capturó a seis (6) personas, entre ellas, al delegado de Etesa para los departamentos de Cesar, Norte de Santander y Santander, Jaime Román Miranda, y cinco (5) de sus asistentes. Señala la comunicación del DAS que el ex servidor público, aprovechándose de sus funciones como delegado de Etesa y en complicidad con los otros cinco sujetos, cobraba a los operadores de juego de suerte y azar por no reportar aquellas máquinas que no estaban ni amparadas en los contratos, ni autorizadas por la entidad para su funcionamiento.