Desde las siete de la noche del martes 19 de julio pasado la Clínica Laura Carolina o Madre Laura decidió unilateralmente cerrar la atención de urgencias, según sus directivos por las amenazas recibidas por lectores de la web de El Universal que han comentado las noticias publicadas en torno al caso de la señora Dulfiria Therán Ruíz, de 86 años, a quien en esa institución le iban a transplantar la cadera cuando no lo requería.
Este medio publicó la noticia el pasado domingo después de que los familiares de Dulfiria Therán Ruíz denunciaron que la paciente, que ingresó en la mañana del 8 de julio pasado con un fuerte dolor en la cadera, después de haber sufrido una caída, demoró cinco días en la Unidad de Cuidados Intensivos, tiempo en el que les informaron que debían operarle la cadera. El hecho es que la paciente afiliada a Coosalud EPS Subsidiada fue trasladada al Hospital Bocagrande el 13 de julio, por petición de sus familiares, donde fue valorada por el personal médico y después de practicarle radiografías le dieron de alta al comprobar que no tenía la cadera afectada.
Posteriormente, el Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis) se pronunció el lunes anterior informando que había iniciado una investigación para determinar lo ocurrido con la paciente Dulfiria Therán Ruíz.
El Dadis programó para hoy una visita para verificar los estándares de garantía de la calidad en los servicios que presta la clínica. Esto para inspeccionar que cumpla con todas las normas establecidas por el Ministerio de la Protección Social en la Resolución 1043 y el Decreto 1011 de 2006, para el funcionamiento de las IPS en aspectos relacionados con el recurso humanos idóneo, dotación y mantenimiento de equipo, manejo de medicamentos, infraestructura, manejo de las historias clínicas, gestión de riesgos entre otros aspectos.
Katherine Egea Amador, directora del Dadis, precisó que esperará los resultados de la visita de verificación. “Una vez se conozca, sabremos si pueden o no seguir prestando servicios”, dijo.
“Dulfiria fue bien atendida”La directora de la Clínica Laura Carolina o Madre Laura, Miriam Pineda; y el gerente financiero, Gabriel Arboleda, accedieron a hablar con El Universal sobre el caso de Dulfiria y advirtieron que siempre la atendieron bien.
“La clínica tiene establecidos unos protocolos de manejos de los pacientes. Si el paciente es referido, se mira el diagnóstico. Cuando eso se establece, entonces el médico evalúa y hace un examen físico y solicita otra evaluación a un especialista”, dijo Miriam Pineda.
“En el caso de doña Dulfiria Therán Ruíz, afectada por Alzheimer, se determina dolor por palpación en la cadera y se presumió una fractura. Por eso se llevó a Cuidados Intermedios. Estando allá, se determinó, luego de exámenes, que además del trauma de cadera, presenta una artrosis de rodilla. Por eso el médico internista ordenó hacerle otros estudios y valoración. Luego los especialistas en ortopedia se reúnen y, después de realizarle placas, determinan la existencia de una posible una fractura, pero para poder ser visualizada se requiere hacerle rotación de cadera. Los médicos deciden pedir una prótesis de Thompson, solo por precaución, pues no se sabía si podía ser usada. La paciente se iba a someter a una rotación de cadera, bajo el seguimiento de un intensificador de imagen, equipo que proyecta en tiempo real el estado de los huesos. Eso se usa para determinar fisuras o fracturas. Es decir, para ver, tomar los pulsos y dejar una evidencia del estado de la cadera. A la señora la ingresaron y había que aplicarle la anestesia para poder hacerle el procedimiento de rotación de cadera. Sucede que antes de ingresarla al quirófano se le practicaron exámenes que mostraban los leucocitos aumentados, lo que determinó una infección, por lo que se aplazó el procedimiento”, dijo.
Agregó que un día después los funcionarios de Coosalud se llevaron a Dulfiria Therán Ruíz al Hospital Bocagrande. Recalca que si se requería la operación se hacia.
Así mismo, Gabriel Arboleda, precisó que en la Clínica Laura Carolina se hace hemodinamia, neurocirugía y procedimientos de tercer y cuarto nivel.
“Me parece que no hay ética en un médico que sin conocer la historia clínica de la paciente entrega declaraciones a los medios lanzando juicios y señalamientos para enlodar la imagen de la Laura Carolina”, dijo Arboleda.
“La preocupación de nosotros es tal que después de realizar un comité de historia clínica que hicimos con los profesionales que atendieron a Dulfiria Therán Ruíz, concluimos que requiere ser valorada nuevamente y para ello es necesario realizarle un TAC. Ya se lo solicitamos a los familiares, claro está con la autorización del Dadis porque nos preocupa que la señora tenga una fisura y esa lesión, que aparentemente, no se ve, pueda generar traumas en el futuro”, anotó Miriam Pineda.
“En esta clínica se atienden bien a los pacientes y se hace todo lo que está a nuestro alcance”, dijo.
“No pagamos a nadie”
Ante los comentarios hechos por algunos foristas en la página web de El Universal sobre los supuestos pagos que reciben los conductores de ambulancias que llevan pacientes a la Clínica Laura Carolina, Miriam Pineda enfatizó que no es cierto.
“Los conductores de las ambulancias de los hospitales de los pueblos de Bolívar, desesperados porque en ninguna clínica consiguen cama llegan aquí porque saben que los atendemos. Es que nosotros estamos para salvar vidas. En los seis años que tiene esta clínica de estar funcionando se han atendido cientos de pacientes accidentados y otros que llegan graves, después de someterse al ‘paseo de la muerte’”, aclaró.
No se atienden urgencias
Según los directivos de la Clínica Laura Carolina, se cerró unilateralmente la atención de urgencias, debido a comentarios que aparecieron en la pagina web de El Universal donde invitaban a los fleteros a que agredieran a quienes trabajan en esta clínica. “Por eso pasamos ese comunicado que el Dadis no quiso recibir, pero que llevamos hasta la misma Alcaldía”, dijo Pineda.
“Nosotros tenemos mañana (hoy) una visita del personal del Dadis. Estamos pendientes y esperando. Hemos adecuado la clínica teniendo en cuenta los procesos de garantía y calidad. Hay comentarios soeces de que la clínica no cumple. Pero lo que no dicen es que tenemos la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) más grande de la ciudad con 13 camas y 10 en Cuidados Intermedios, lo que no tienen muchas instituciones. Muchos pacientes han salido vivos de esta clínica. Invito a la comunidad a que de la misma forma como nos tachan y nos dicen cosas negativas también digan lo bueno que se ha hecho”, indicaron.
“El cierre de la urgencia va a perjudicar a toda la comunidad. Vamos a aceptar a los pacientes remitidos que requieran atención especializada de tercero y cuarto nivel”, dijeron los directivos.
DeudasSegún Gabriel Arboleda y Miriam Pineda, el Dadis debe a la Clínica Laura Carolina $8.500 millones, por servicios prestados desde el 2006 por atención a vinculados. “Coosalud debe 3.000 millones de pesos y ya se profirió un embargo. El Fosyga nos adeuda 4.200; la Secretaría de Salud del Departamento no ha pagado $4.200 millones y la Mutual Ser nos debe $3.000 millones”.
“En estas condiciones es difícil seguir trabajando y más cuando hay muchos enemigos, entre ellos un veedor que nos acosa y que dice que aumentamos los cobros de servicios a los pacientes de SOAT. Todo está en manos de las autoridades para que investiguen”, advirtieron.
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