La devoción a la Virgen del Carmen sigue viva

¡Viva la Virgen del Carmen¡  ¡Que viva!
A una sola voz, miles de feligreses llegaron la tarde del lunes al Centro Histórico de Cartagena para caminar la procesión de la Virgen del Carmen, celebración que cada año se realiza en la Heroica.
La fiesta religiosa,  se inició en la catedral Santa Catalina de Alejandría, con una eucaristía a las cuatro de la tarde y luego salió la procesión con la imagen a hombros por todas las calles del Centro. La peregrinación fue acompañada por un sacerdote, quien realizó varias estaciones y en cada una de ella hacia peticiones por las familias de los fieles cartageneros, en especial por la paz.
“Pidamos a la santísima Virgen del Carmen que nos ayude a seguir en  nuestro peregrinar por la vida, y que así como ella supo llevar su hogar ayude a que nuestras familias permanezcan en unidad con Dios”. “Pidamos por la paz de Cartagena, para que por intercesión de la Virgen del Carmen podamos conseguir la paz que tanto necesitamos” enfatizó el párroco.
La fiesta de la Virgen del Carmen es una de las fiestas religiosas que más mueve multitudes. Los conductores y los navegantes quienes la tienen como su santa patrona, fueron los encargados de llevar el paso con la imagen, acompañados por una gran multitud que pedía a la Virgen el milagro de la paz.
“Yo creo que el mayor clamor es por la paz todos los cartageneros debemos pedirle a la Virgen por la paz que es lo que más necesitamos”, Osmundo Marrugo Arellano, quien hace más de cinco años participa de esta procesión como guía.

ADVOCACIÓN DEL MONTE CARMELO
La del Carmen o Monte Carmelo es una de las advocaciones de la Virgen María que más devotos congrega a su alrededor, y la que más ruido genera por las celebraciones festivas de que es objeto. En Cartagena son muchos los feligreses que ya tienen como costumbre caminar la procesión y pagar las “mandas”, en las cuales cumplen la promesa de asistir con fe y devoción a este acto religioso.
“Siempre he sido devota de la Virgen del Carmen y asisto todos los años para pagar mi manda y pedirle por las necesidades de mi familia”, afirma Karolain Villero, quien este año cumple tres años de asistir con su hija vestida como la Virgen del Carmen.
“Yo visto a mi hija así porque le prometí que cuando naciera lo iba a hacer para pedir por su salud. Ya hoy terminé de cumplir la manda de traerla los primeros tres años vestida como la Virgen”.
En muchos municipios, este día es declarado cívico, dadas las celebraciones que se organizan y si bien la fecha es tomada por muchos para ponerle ambiente festivo a la ocasión, lo cual es criticado por la Iglesia por los desafueros que muchas veces se dan, muchos fieles lo hacen por fe.
“Es la fe la que nos permite reconocer a Cristo y es su mismo amor el que impulsa a socórrelo cada vez que se hace nuestro prójimo en el camino de la vida”, dice uno de los mensajes eclesiásticos difundidos con ocasión de esa fecha religiosa y atribuido al papa Benedicto XVI.