Las 145 familias ya saben en que casa le corresponderá vivir

Mirían Zúñiga Casiani, es una de las más de 80 mujeres cabeza de hogar que fueron beneficiadas con las casas de Ciudad del Bicentenario. Para esta madre de tés morena, y de unos 40 años de edad, Dios se glorificó en ella luego de los ires y venires con sus tres hijos, los que cría gracias a la ayuda de una hija que vive en Venezuela y el poco dinero que logra que su ex marido le entregue. La mujer vivirá en la casa 5 de la manzana 5, esa fue la ficha que le correspondió luego de meter la mano en una bolsa, en el sorteo realizado ayer en el Centro Recreacional Napoleón Perea, con la presencia de miembros de la Personería Distrital, quienes asistieron como garantes del proceso. Zúñiga, asegura que 8 meses atrás nunca se imaginó que se iba a ubicar en este lugar con sus hijos, el que bautizó desde hoy “el milagro de Dios”. Con la capacitación que le ha dado el Sena por gestión de Corvivienda y Fundación Santodomingo, en manipulación de alimentos, Mirían piensa en la posibilidad, de iniciar su nuevo negocio de almuerzos corrientes, todo para cumplir con la obligación de pagar puntualmente los recibos de los servicios, de agua, energía y gas natural. Saben donde les toca Los 145 beneficiarios, entre ellos 55 personas desplazadas, sacaron una ficha, para saber en que vivienda le corresponde vivir, aunque oficialmente se les entregará luego de un proceso de de-molición de la casa en la que hoy habitan, por estar algu-nas en zona de alto riesgo y para evitar que otras personas se asienten en ellas. Lo que viene Dentro de la programación establecida por Corvivienda y la Fundación Mario Santodomingo, continúa el acompañamiento de las familias en aras de construir comunidad, a través de actividades que le ayuden a la convivencia ciudadana y el empoderamiento de la urbanización donde vivirán. “Es necesario que entiendan que de ahora en adelante el mantenimiento de sus viviendas y de las zonas verdes que la rodean les corresponde a ellos, y que no pueden des-cuidar la urbanización y pro-pender para que siempre este limpia y bella como hoy se les entrega”, explicó Barbarita Gómez, de la Fundación Santodomingo.