Cartagena


Los Alpes no es como lo pintan

RUBÉN DARÍO ÁLVAREZ P.

23 de septiembre de 2009 12:01 AM

“Para unas cosas pertenecemos al estrato cuatro, pero para otras no”, dicen los habitantes del barrio Los Alpes cuando tienen que hablar de las problemáticas que padece este sector de la Zona Suroccidental de Cartagena. Desde hace unos treinta años la mayoría de los moradores de la llamada Nueva Cartagena opinan que Los Alpes es uno de los mejores barrios de sus alrededores, basados en la elegancia que le dan sus enormes casas y algunas de sus calles pavimentadas. Pero dialogando con los miembros de la Junta de Acción Comunal y hasta con los vecinos de las diferentes calles, es posible enterarse de las anomalías que se padecen en cuanto a infraestructura y servicios públicos. Pavimento y servicios Santander Flórez, el presidente de la JAC, dice que el gremio a su cargo lleva más de diez años gestionando, ante al Gobierno distrital, para que sean pavimentadas doce calles que en estos momentos no sólo afean los sectores por donde están trazadas sino que también se convierten en un serio inconveniente para transeúntes y vehículos en épocas invernales. La más crítica de todas las calles es la 71d (o “Calle de la lengua”), que comunica al barrio Trece de Junio con la avenida Pedro de Heredia, pero padece huecos, charcos y monte, además de las aguas servidas que, según los de la JAC, son arrojadas por los habitantes de la vecina urbanización Puerta de Los Alpes. Los vecinos de Los Alpes dicen ser puntuales y disciplinados en el pago de los servicios públicos, razón por la cual viven solicitándole a las empresas Aguas de Cartagena y Electricaribe mayor eficiencia en la prestación del agua potable y de la energía eléctrica, respectivamente. “El agua llega con poca presión a las partes altas —dice Santander Flórez—; y la energía eléctrica se va, por varias horas, hasta tres veces en la semana. Según Electricaribe, nosotros pertenecemos al circuito Ternera 5, el cual, al parecer, no alcanza a alimentar con eficiencia las redes de este barrio. Por eso, estamos pidiendo que nos pasen para el circuito Zaragocilla 3, que nos es más cercano y de seguro resultará mucho más eficiente”. El espacio público Desde finales de los años setenta, cuando arreció la comercialización de la avenida Pedro de Heredia, Los Alpes fue uno de los principales afectados, pues no sólo inmuebles que se levantan en las orillas de esa arteria empezaron a transformarse para convertirse en negocios de toda índole, sino que ese mismo sitio se erigió como corredor de ventas de estupefacientes en los años ochenta, fenómeno que entrado el siglo XXI se redujo considerablemente. “Ahora —dice Yaneth Machacón, de la JAC— el problema es la ocupación del espacio público. La Calle 71 con 31A es el sector que más sufre este problema, porque allí funcionan negocios de todo tipo; y la cantidad de carros estacionados en plena vía es impresionante. Pero en casi todas las calles se ven los vehículos, los equipos de talleres y los avisos publicitarios quitándole espacio a la gente. El transeúnte tiene que tirarse a las vías, porque no puede caminar por los andenes”. La Transversal 71 es una de las principales entradas al barrio, pero actualmente es una de las más problemáticas, ya que por ella cruza un canal de aguas pluviales que ya resulta insuficiente para el crecimiento del barrio y para el volumen de aguas lluvias que recibe cada año, lo que se traduce en la inundación de la vía y de las viviendas cercanas siempre que se presenta una precipitación. Los moradores instauraron una acción popular para conseguir la ampliación del canal y la ganaron, pero el Gobierno distrital se ha demorado en cumplir dicho recurso, según informan los miembros de la JAC. “Por eso —agregan— no es mentira que aquí se pagan servicios de estrato cuatro, pero se reciben con la calidad de un estrato dos. Y también es cierto que la Administración distrital se ha dormido creyendo que por ser estrato cuatro, no necesitamos de más nada”. Una dama de gestas cívicas Gertrudis Romero ha sido un personaje de gestas cívicas, desde que llegó en 1974. Es reconocida por ser impulsora de obras y acciones tendientes a mejorar el desarrollo de la calidad de vida de sus vecinos. Por eso la consideran el personaje del barrio. “Me tienen mucho cariño porque de una u otra forma he contribuido con el desarrollo del barrio en materia social”, cuenta. Ha puesto su granito de arena liderando iniciativas ante las administraciones distritales, logrando la pavimentación de algunas calles. “Este era un barrio olvidado por los políticos de turno, pero ha logrado progreso gracias a la inquietud de su gente”, expresa. Y es que a punta de basares, bingos, rifas y un sinnúmero de actividades, se consiguieron varias obras como la construcción del templo católico Cristo Sacerdote, el levantamiento del Parque Central y la adecuación de un puesto de salud. Con 70 años a cuestas y prestando su casa como sede del puesto de salud, Gertrudis se dedica a la atención de los primeros auxilios, ya que es auxiliar de enfermería. Allí hace tomas de presión, control peso, muestras de laboratorio e inyectología. “Este es un servicio que no tiene costo, se financia con el aporte que la persona pueda dar; y si no tiene, no se le cobra”, puntualiza. Campeonas consentidas En el barrio, ya muchos hablan de ellas. Son talentosas y prometen tener un buen futuro en la parte deportiva. Rina Equivia Machacón, a sus 10 años de edad, ya ha sido dos veces campeona nacional en gimnasia artística, acumulando seis medalla de oro. Ambos títulos los consiguió en Bogotá y es la actual campeona regional en la modalidad de piso. Por su parte, Keity Caraballo Berrío fue campeona de velocidad en patinaje realzado en Bogotá y en otras ciudades. Ha conseguido importantes premios de los “que yo no me acuerdo ahora, pero son varios”, dice. Ganó en los recientes juegos intercolegiados 6 medallas de oro en velocidad y fondo. Ambas son las cartas del Instituto Los Alpes. Sus cualidades deportivas han generado los comentarios más generosos hablando de su futuro. Keiti pertenece al Club Codecar; y Rina, al Club Iron Boys. “La verdad es que quiero ser como la ‘Chechi’ Baena. Mi sueño es ser una de las mejores de Colombia”, señala Keiti. Rina, por su parte, confía en poder llegar muy lejos también, pues a su corta edad ya acumula 24 preseas doradas en distintas competencias. Ambas están unidas en sus sueños y sólo esperan más apoyo de los institutos de deportes de Cartagena y bolívar para llegar a lo más alto de la cúspide en sus deportes. Solicitan fumigación Yaneth Machacón, secretaria de la Junta de Acción Comunal del barrio Los Alpes, reclama una urgente fumigación de la calle 71d, conocida como “La Calle de la Lengua”, para evitar que la comunidad siga contagiándose de dengue. La líder comunitaria indica que en las ultimas semanas se han registrado 3 casos de dengue clásico, los cuales han sido reportados al Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis). Machacón también pide acciones para evitar enfermedades trasmitidas por otros vectores como las ratas, que abundan en el sector. “Es necesario que las autoridades respectivas se interesen en estos casos, debido a que son temas que nos aquejan y preocupan, toda vez que amenazan la salud de los habitantes del sector”, manifiesta. La comunidad solicita que la fumigación esté acompañada por una jornada de limpieza de alcantarillas, canales y lotes enmontados, lugares donde proliferan las plagas. La acción comunal requiere que la fumigación también se extienda a todas las calles del barrio y a los alrededores del mismo.

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