Manga se queda sin patrimonio republicano

Residentes de Manga, en especial los miembros de la asociación de vecinos Asomanga, esperan despejar sus dudas sobre la suerte de las casas republicanas de interés cultural y patrimonial que quedan en este barrio, en un próximo foro sobre esta materia que se hará en Cartagena de Indias, en fecha y lugar por definir.
Según Asomanga, apenas quedan 20 casas patrimoniales, de 48 que existían en el barrio.
Los inmuebles restantes han desaparecido por cuenta del modernismo dominante que se implanta con las nuevas construcciones, y el lento e implacable deterioro que las consume hasta dejarlas en ruinas.
Esto ocurre porque son casas tan grandes que su mantenimiento cuesta demasiado dinero, o han quedado en manos de herederos que se desentienden del tema patrimonial histórico y prefieren dejar que el olvido y el abandono hagan lo suyo.
Otros para deshacerse de lo que ven como un problema, las venden a un buen postor, quien casi siempre tiene fines empresariales o lucrativos, con un claro objetivo remodelativo acorde con los nuevos tiempos.
Por estas razones, voces de la zona manifiestan su preocupación frente al destino de estos inmuebles, muchos de los cuales siguen siendo demolidos para construir en su lugar edificios modernos con propósitos ajenos a los de salvaguardar el valor histórico de las casas.
Asomanga invitó formalmente al Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena (IPCC) y al Concejo Distrital al foro que se realizará pronto, para definir las políticas y normas que permitan la protección del patrimonio arquitectónico de Manga.

APRECIACIONES
Para Luis Fonseca Castillo, presidente de Asomanga, el problema empieza cuando el Gobierno Local declara patrimonio distrital estos inmuebles por ser valores históricos de interés cultural, pero no reglamenta el tema, dejando bienes sin la debida normatividad que los ampare y defienda como monumentos republicanos.
Olimpo Vergara Vergara, jefe de la División de Patrimonio Cultural del IPCC, por su parte admite que los ciudadanos de Manga tienen completa razón al preocuparse por el asunto histórico patrimonial de ciertas casas del barrio.
Sin embargo aclara que no todas aquellas casonas de Manga que están en la retina de la gente porque aparentemente tienen todos los méritos para ser declaradas patrimonio histórico, están tuteladas o protegidas por la ley para ser mantenidas como tales. “Legalmente no lo están”, indica el funcionario.

GÉNESIS DEL PROBLEMA
El Plan de Ordenamiento Territorial (POT) o Decreto 0977 del 2001 señala en un aparte que para el caso de los inmuebles de conservación, cuando exista una diferencia entre lo escrito y lo que aparece en planos, prima lo que está en planos.
Pero aunque el POT hace esa claridad, “no existe coherencia en toda la planimetría en lo que se refiere a inmuebles de conservación, puesto que hay unos planos que tienen 10 inmuebles, en otros aparecen 15 y otros contienen solo 2, así que hay inconsistencia”, añade Vergara.
Varios de estos documentos no coinciden con el número y los nombres de los inmuebles considerados patrimoniales.
Cuenta el jefe de Patrimonio de Cartagena que en un intento por acabar con estos vacíos, Planeación Distrital expidió una circular en el 2008 indicando que el único plano válido es el que fue formalizado en 1978, “porque está debidamente rubricado, pues tiene la firma del secretario de Planeación y del alcalde del momento, pero resulta que en ese plano es donde menos inmuebles protegidos aparecen”.

NAUFRAGIO PATRIMONIAL
Todo esto quiere decir en resumen que existe un problema grande que ha estado a la deriva durante mucho tiempo, como es que no todos los inmuebles de Manga con méritos históricos están declarados patrimonio cultural de interés general, y en complicidad con esto, hay evidentes vacíos en los viejos actos administrativos de declaratoria de protección patrimonial de los inmuebles históricos.
Esto suele ser aprovechado jurídicamente por los abogados y constructores para iniciar procesos legales que a la postre ponen en riesgo la conservación patrimonial histórica de las casas republicanas, montando en estos sitios construcciones modernas, lo cual sería legítimo porque no habría las armas legales para detenerlos, deja entrever Olimpo Vergara.
La situación es semejante para inmuebles históricos en otros barrios como El Cabrero, Pie de La Popa, Bocagrande e incluso Torices. Se deduce que hacer una evaluación de todos estos inmuebles para ponerle orden al tema, no es sencillo.

UNA LUZ
Olimpo Vergara, jefe de la División de Patrimonio Cultural del IPCC, manifiesta que con la ayuda de estudiantes universitarios de la Tadeo Lozano, el Distrito ha avanzado bastante en las fichas de actualización de los inmuebles históricos, contrastándolas con la información que aparece en el POT para poner en debida forma los actos de declaratoria de protección.
Por otra parte explica que cualquier persona puede hacer una solicitud de declaratoria de protección patrimonial de un bien histórico ante el IPCC, que entonces la presenta al alcalde previo concepto del Comité Técnico Asesor del Distrito. El mandatario a su vez hace la solicitud al Concejo Distrital para su debido trámite y aprobación.

PROPOSICIÓN SIN DECLARATORIA
El Ministerio de Cultura el evaluar su lista de monumentos nacionales se percató en su momento de que varios de los inmuebles más relevantes de Manga, como la Casa Román y la Casa Vélez de Villa Susana, entre otras, no tenían declaratoria como bienes de interés cultural.
No estaban entonces legalmente constituidas como patrimoniales, sino que había era resolución de proposición de declaratoria, que es diferente porque es la etapa previa a la de protección patrimonial.
De inmediato Bogotá se puso al frente de la situación para corregirla, pues en Manga existen apenas nueve casas que son monumentos nacionales, el resto de inmuebles que están en el catálogo de bienes patrimoniales son monumentos distritales.
Quiere decir esto que unos inmuebles son representativos para la nación y otros lo son para el Distrito de Cartagena.