La ansiedad y la alegría embargan por estos días a Nohemí Julio Suárez, madre del mayor de la Policía, Guillermo Solórzano Julio, secuestrado hace más de tres años por la guerrilla de las Farc.
La madre del uniformado cree que la aprobación dada ayer por las Farc al protocolo de seguridad para la liberación de cinco secuestrados, acerca cada vez más a Solórzano a su hogar.
Nohemí Julio dice que no ve la hora de abrazar al mayor Solórzano, pero aclara que aún no ha recibido comunicación alguna del Gobierno Nacional sobre el lugar, día y hora en que sería su regreso a la libertad.
“Apenas nos den la señal iremos a Bogotá sus padres, hermanos, su esposa y su hija de 10 años para darle una bienvenida amorosa”, asegura la madre del raptado.
Julio afirma que “quien ya está en Bogotá pendiente de cualquier novedad es su esposa, que desde hace unas semanas empezó a trabajar en la capital. Su niña está en Montería porque va a entrar a clases, pero seguro lo acompañará el día de su liberación”.
La familia del cmayor Solórzano dice que lo único que sabe de momento es lo publicado en medios de comunicación, pero está tranquila porque confían plenamente en el Gobierno, personas y organismos que participan en el proceso de liberación.
“RESPETAMOS SU DECISIÓN”
La mamá de Solórzano asevera que aún no ha pensado en ninguna celebración o detalle especial para el día de la liberación, pero tiene claro que lo primero que hará es abrazarlo fuertemente y decirle cuánto lo ama.
“Imagino que después que le hagan los exámenes médicos respectivos y se aseguren de que está bien (el Mayor) tendremos una celebración familiar en la que esperamos brindarle una comida con los mariscos que tanto le gustan”, comenta Julio.
La madre del cautivo no descarta un recibimiento caluroso de los cartageneros a Solórzano, quien nació y se crió en esta capital.
Nohemí advierte que la decisión sobre la continuidad o no del Mayor en la Policía depende de él y dice que “lo único que tenemos para la Policía y el Gobierno es agradecimientos, porque no nos han abandonado en todo este tiempo y por el contrario han sido un apoyo constante para toda la familia”.
La familia de Solórzano envió hace cuatro días un mensaje de 20 segundos al uniformado a través de la cadena radial Caracol, en el que expresa su alegría por su liberación inminente.
Nohemí Julio asegura con base en las cartas más recientes recibidas de su hijo, que él está bien de salud, come tres veces al día y hace ejercicio regularmente.
Al referirse a las Farc, Julio expresa: “No guardo rencor a los secuestradores de mi hijo, sino que más bien estoy agradecida con Dios y la vida por la oportunidad de tenerlo nuevamente cerca, sano y libre”.
SECUESTRO
El mayor de la Policía, Guillermo Solórzano Julio, tiene 35 años y fue secuestrado el 4 de junio de 2007 en el municipio de Florida (Valle), donde comandaba la Estación de Policía.
Solórzano fue secuestrado junto a un comerciante y su hijo, quienes posteriormente fueron liberado por las Farc y él fue incluido en la lista de canjeables que este grupo guerrillero presentó al Gobierno Nacional.
El capitán Solórzano había sido trasladado a Florida en 2006. Antes había estado tres años en el Cauca, en los municipios de Silvia, Caloto y Popayán.
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