Niegan detención domiciliaria a ex gobernador Simancas

Tal como están la cosas, el ex gobernador de Bolívar, Libardo Simancas Torres, pasará Navidad y fin de año recluido en la Base Naval de Cartagena, debido a que la Fiscalía le negó la solicitud de detención domiciliaria presentada por su abogado defensor. Según informó la Oficina de Prensa del ente investigador, la investigación contra el ex gobernador por presuntos nexos con paramilitares pasará del fiscal 26 de la Unidad Nacional contra el Terrorismo a manos del Despacho del Fiscal General de la Nación. Simancas Torres se mantiene recluido desde el 13 de agosto de este año en la Base Naval de Cartagena, en Bocagrande de manera temporal, debido a una solicitud presentada por su abogado defensor, José Aníbal Gómez Gallego, al fiscal especializado de la Unidad contra el Terrorismo que llevaba el caso, tras argumentar serios quebrantos de salud y razones de seguridad del ex funcionario, lo que le impediría estar en un centro carcelario. El ex mandatario, a juicio de su defensa, necesita seguir un tratamiento y vigilancia médica, lo cual no estaba garantizado en una cárcel. Precisamente antes de su reclusión en la Base Naval había afrontado dos preinfartos e inestabilidad en su tensión. Simancas Torres permaneció recluido en el hospital de Bocagrande desde el pasado 6 de agosto, después de sufrir problemas cardíacos y luego de que fuera notificado de la medida de aseguramiento en su contra por el presunto delito de concierto para delinquir agravado, tras ser señalado por varios ex paramilitares de colaborar con las autodefensas. En el centro hospitalario permaneció hasta el 12 de agosto, de donde salió trasladado a la unidad militar. El ex mandatario ha asegurado en reiteradas ocasiones que no necesitó del apoyo de paramilitares, ni de otros actores armados ilegales para ser elegido y por ello confía que saldrá airoso de esa investigación. La solicitud de revocatoria de la defensa del ex gobernador se basaba en que los señalamientos de paramilitares referente a su presunta colaboración con el ex mandatario habían sido totalmente desvirtuados, incluso, en otros procesos penales y por ende no había bases para endilgarle delito alguno.