Reinvasores se oponen a dejar el espacio público

Escenas de riñas e insultos por parte de vendedores informales que se apostan en la Avenida Venezuela, fueron su respuesta al operativo de restitución de espacio público que ayer adelantaron 15 brigadistas de la Gerencia de Espacio Público de Cartagena. Según Juan Castillo, supervisor del operativo, hacia las 2 de la tarde un vendedor informal amenazó con un destornillador a uno de los funcionarios de esa dependencia distrital, para que no le fuera decomisada la mercancía que vendía. Los funcionarios distritales decomisaron 11 carretillas de vendedores semiestacionarios y varios paquetes con diferentes productos, lo que desencadenó la ira de los informales. Esto obligó a la Policía a ejercer presencia. No obstante, al final el operativo fue frustrado por los vendedores, pues los pocos agentes de policía que llegaron no fueron suficientes para disuadir a los vendedores, que abandonaron el espacio provisionalmente y guardaron en locales cercanos sus productos. “Los comerciantes tienen que tener claro que las carretillas están totalmente prohibidas en el Centro Histórico, eso hay que recalcarlo porque mucha gente parece no entender todavía eso”, sostuvo el supervisor del operativo. Así mismo, la Gerencia de Espacio Público desarrolló en la mañana de ayer un operativo semejante en el Pie de La Popa, donde decomisaron 10 carretillas. Más operativos “Queremos que la gente se enteré de cómo los vendedores informales están atacando con frecuencia a los brigadistas que velan por la recuperación del espacio de todos”, explica Juan Castillo. El gerente de Espacio Público, Adelfo Doria, manifestó que esta clase de diligencias se mantendrá en distintos puntos de la ciudad, en especial en la Avenida Venezuela, donde “el Distrito hizo una inversión económica muy grande para recuperar el espacio, por lo que no vamos a permitir una reinvasión”. El funcionario distrital subrayó que los operativos también se enfocarán en el Pie de La Popa, en inmediaciones de la Clínica del Mar y en la Calle Real. Los funcionarios también desplegarán sus esfuerzos en los alrededores del Centro Comercial La Castellana. “No hacemos nada malo” Por su parte, Yoemi Benavidez, vendedora de controles remotos, indicó que había sido rasgada por uno de los brigadistas que realizaron el operativo. “Nosotros no podemos dejar de vender porque tenemos que hacer para la comida, no es justo que nos amenacen y que se midan a la fuerza con nosotros que no estamos haciendo nada malo”, expresó la comerciante informal. Y agregó: “Lo que queremos es que nos dejen trabajar. La Alcaldesa (Judith Pinedo Flórez) nos tiene una persecución”.