Retenes ilegales, a la orden del día

Además de los puestos de control que monta la Policía para garantizar la seguridad ciudadana, verificar antecedentes y realizar pruebas de alcoholemia durante los festejos del 11 de Noviembre, en los barrios y vías importantes como la Perimetral, hombres y jóvenes con la piel llena de aceite quemado y armados con puñales o lanzas  levantan una cabuya y organizan sus propios retenes.
No importa si usted va en carro, en moto o caminando. Todos deben detenerse, so pena de ser mojados con grasa, barro, orín, e incluso excremento en el peor de los casos.
Este medio realizó un recorrido por diferentes sectores de la ciudad, con el único fin de realizar una nota periodística sobre cómo se vive el 11 de Noviembre en los barrios, pero lo que se encontró dista de la fiesta y la alegría popular que en años anteriores abundaba en todos los rincones de la ciudad. 
No hubo un barrio de los visitados donde no se encontrara un retén ilegal. E incluso, se recibieron denuncias en Colombiatón de atracos a ciudadanos que se negaron a dar una moneda a los “negritos”, léase hombres y jovencitos con la piel embadurnada de aceite quemado, que montaron los retenes.
En el Paseo de Bolívar, varios ciudadanos denunciaron que un grupo de hombres con máscaras robaron celulares y dinero a por lo menos 20 personas que pasaban por esa zona entre 1 y 2 de la tarde.
“Se acercaban en grupo y con gritos aturdían a la víctima, mientras otro de ellos le sacaba un puñal y le quitaba cualquier prenda de valor”, dijo una mujer que debió entregar su celular y el monedero con los únicos cinco mil pesos que llevaba para el Bando.
“Ahora no sé qué voy a hacer para devolverme, pues imagínese yo vivo en Olaya Herrera y no tengo recursos para el transporte”, dijo la mujer al tiempo que recalcó que los ladrones se perdieron en la muchedumbre gritando sin que nadie se percatara.
Otros ciudadanos denunciaron que en Colombiatón a las personas que no daban dinero en los retenes ilegales les tiraban orín. “Esto no es justo y se necesita que la Policía haga presencia en estos barrios porque llevamos una semana soportando los desmanes de estas personas que durante las fiestas encuentran en los retenes ilegales un medio de subsistencia”, dijo un celador que habita en ese populoso sector.
“Heces y agua podrida ”
Reginaldo Padrón Altamar, un conductor de taxi, denunció que en la Vía Perimetral de la Ciénaga de La Virgen hay por lo menos siete retenes ilegales que obligan a que todos los vehículos se detengan y paguen mínimo $1.000 para dejarlos pasar.
“Vea yo nada más pude dar $500 y me tiraron excremento fresco en el parabrisas y agua podrida”, dijo indignado el taxista.
Otros cartageneros que usaron la Vía Perimetral para llegar más rápido a la Avenida Santander advirtieron que faltó más vigilancia policial en la zona. “No es justo que estas personas utilicen a menores de edad como escudo para obligar a los conductores a detener los vehículos y la autoridades no aparezcan”, dijo una docente que debió entregar cinco mil pesos para que no le tiraran heces a su vehículo.
No hay disfraces
A Anastasio Cardona, un obrero de 62 años, ya no le gustan las fiestas del 11 de Noviembre. Por estos días prefiere quedarse encerrado en su vivienda del barrio Torices porque dice que la esencia se perdió.
“En mi época daba gusto salir a la calle durante las fiestas, pues habían desfiles, disfraces imaginativos que llamaban la atención de todo el mundo. Ahora lo que hay es irrespeto y vagabundería”, dijo.
Lo cierto es que en el recorrido que realizó este medio fueron pocos los disfraces hallados. El más predominante fue el de los negritos, que se han convertido en una amenaza para quien ose salir en estos días de fiesta.
“Estamos controlando”: Barrera
El coronel Jaime Barrera Hoyos, comandante operativo de la Policía de Cartagena, indicó que en las últimas 24 horas se han detenido 36 personas por intimidar a los ciudadanos en retenes ilegales.
“De estas 36 personas, 18 son menores de edad, que han sido entregados a sus padres”, dijo.
Recalcó que en la mayoría de estos retenes, amenazan a los ciudadanos con ensuciarlos de aceite o barro. “Pedimos a la comunidad que denuncie los abusos a la línea 112 de la Policía Nacional para poner freno a esta clase de retenes”, dijo.
Recalcó que en Cartagena hay 2.400 policías controlando el orden durante las fiestas.