Extender las jornadas laborales y acelerar el ritmo de las obras es la única posibilidad para recuperar el tiempo perdido en el tramo 5A de Transcaribe, entre Bazurto y La Popa.
Enrique Chartuni González, gerente del macroproyecto, asegura que la prioridad en este trayecto es la construcción de la vía y que la adecuación del espacio público será complementaria, teniendo en cuenta la urgencia de que el Sistema Integrado de Transporte Masivo (SITM) empiece a operar.
El funcionario afirma que de momento los mayores avances de este tramo están en la calzada derecha de la Avenida Pedro de Heredia, en dirección al Centro, desde La Popa hasta Autos El Perrito, en el sector El Toril.
Ahí se ha puesto polisombra, demolido predios, instalado postes nuevos y dispuesto redes de servicios públicos.
LO MÁS DIFÍCIL
En 10 ó 15 días arrancarían en firme los trabajos frente a los almacenes de venta de colchones y muebles, donde precisamente laboran las personas que mediante tutelas exigen compensaciones económicas al Distrito.
En este lapso, conforme al cronograma de obras, se harán labores de limpieza del terreno y reinstalación de polisombra, a fin de que cause el menor impacto posible en el comercio formal de la zona.
“Esperamos que no surja ningún inconveniente con estas personas y que no haya necesidad de que la Fuerza Pública intervenga para que se realicen las intervenciones en este sector”, indica Chartuni.
En este sentido, el Gerente de Transcaribe señala que el Consorcio Cartagena 2010, a cargo del tramo 5A, tiene cierta prevención por los incidentes ocurridos en el arranque de los trabajos, y por eso ha pedido garantías de seguridad para su personal.
“El Distrito está trabajando con los comerciantes de la zona para que permitan la ejecución de las obras y no haya choques con la comunidad”, comenta Chartuni.
DEL DICHO AL HECHO
El Gerente de Transcaribe dice que sí bien la parte problemática del tramo de Bazurto estaba prevista desde la concepción del proyecto, “eso no quiere decir que los problemas se vuelvan más fáciles de resolver por conocerlos. Sigue siendo un tramo complejo y debemos afrontarlo”.
Si los inconvenientes con los vendedores parecen complicados, lo son aún más las obras de infraestructura que están por delante, entre las que está el reemplazo de una tubería de acueducto de 64 años de antigüedad que atraviesa el tramo, y la reconstrucción de tres canales y del sistema de drenajes de Bazurto.
El funcionario confía en que cuanto antes sean retirados los vendedores informales de carril ‘solobús’ de Bazurto, a fin de que el contratista tenga más áreas de trabajo disponibles y pueda cumplir con la entrega del tramo en diciembre de este año, cuando se vence el plazo estipulado en el contrato.
Aunque es apresurado afirmarlo, los inconvenientes y retos del trayecto hacen reflexionar sobre si va a estar listo para la fecha prevista, o si al igual que los construidos necesitará de prórrogas para terminar las obras.
NO TODO ESTÁ DICHO
Alberto Schmalbach Silva, abogado de los comerciantes inconformes de Bazurto, asegura que aunque en los últimos días ha habido fallos judiciales adversos a los intereses de sus defendidos, hay varias tutelas que aún están por resolver y podrían ordenar la suspensión de las obras en el tramo 5A hasta tanto se defina la situación de los tutelantes.
El jurista asegura que son 13 las tutelas que se han presentado en distintos juzgados de la ciudad y confía en que algunas sean favorables a sus clientes.
Respecto de los fallos contrarios a los informales, Schmalbach afirma que ya han sido impugnados usando como argumento el hecho que el Distrito no ha cumplido con el debido proceso para retirar a los informales quejosos y que por tanto ha incurrido en una violación de sus derechos al trabajo, mínimo vital, entre otros.
“Confiamos en que la justicia dará la razón a personas que necesitan su trabajo para vivir y que realmente hacen parte de un grupo de la sociedad cartagenera que tiene grandes necesidades y que requiere la ayuda del Distrito”, puntualiza el abogado.
APOYO DE ACOVIVA
La Asociación de Comerciantes de Víveres y Abarrotes de Cartagena (Acoviba), presidida por Guillermo Ramírez Jiménez, expresa su respaldo a las obras de Transcaribe en Bazurto y asegura que entre más rápido se ejecuten la afectación al comercio será inferior.
Por esta razón, Acoviva ha asumido un rol mediador que pretende solucionar las diferencias de algunos comerciantes formales e informales de Bazurto con el Distrito, a fin de que no haya ganadores ni perdedores, sino concertación.
“La premisa mayor es la aceptación por parte de todos los comerciantes del sector, de que dicha obra debe ejecutarse dada la transformación benéfica que implica para la ciudad. El compromiso adquirido es que somos los más interesados en que se ejecute con las más altas calidades técnicas y en el menor tiempo posible, para mitigar de esta manera los traumas que ocasiona al comercio y a la movilidad de la gente, evitando de paso sobrecostos que lesionan el erario público”, dice Ramírez.
Acoviva reconoce que los incumplimientos en otros tramos no son la mejor carta de presentación para Transcaribe y por tanto no se permitirá que en el tramo 5A se repitan errores como el cierre de trayectos que no van a ser intervenidos de inmediato, o parálisis total de maquinarias y obreros.
La asociación de comerciantes anuncia estar dispuesta incluso a ofrecer refrigerios a los obreros o cualquier apoyo que haga falta a Transcaribe o al Distrito, para que las obras se hagan en el tiempo previsto, esto siguiendo el ejemplo de otras ciudades del país, donde esta metodología ha sido exitosa.
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