Transcaribe espera que obras de Bazurto terminen en seis meses

El gerente de Transcaribe, Enrique Chartuni González, dice que si el contratista del tramo 5A de este macroproyecto, que va de Bazurto a La Popa, se compromete a aumentar su rendimiento puede terminar la construcción de este trayecto vial en junio de 2012. 
El funcionario asegura que las condiciones para el que el Consorcio Cartagena 2010, a cargo de estos trabajos, avance están dadas y aclara que los predios que faltan por entregar en este tramo son solo cinco y no 39 como afirmaron voceros de esta constructora a El Universal.
Chartuni agrega que el tema predial no puede ponerse como excusa para los retrasos en estas obras y afirma que “en este contrato siempre ha habido predios disponibles para trabajar pero lastimosamente al principio al contratista le faltó conformar un equipo con más experiencia y emplear la maquinarias necesaria para lograr una mayor celeridad en la construcción del tramo”.
La Gerencia de Transcaribe reconoce las dificultades que supone trabajar en un tramo como el de Bazurto pero asevera que solo se podrá avanzar en este en la medida en que se aumente el número de obreros, maquinaria y se disponga de los recursos económicos suficientes por parte del contratista.
SIN CONTROVERSIAS
Lejos de querer polemizar, Chartuni deja claro que su interés es que la obra se termine y para eso hay un borrador de cronograma de trabajo que incluye la concesión de una prórroga de cinco meses y medio al Consorcio Cartagena 2010, la cual busca que este entregue el tramo finalizado a más tardar el 31 de mayo del próximo año.
Aunque no da cifras concretas, el funcionario afirma que a esta constructora se le han impuesto multas por incumplimiento y aclara que este es el único mecanismo que tiene a la mano para obligarlo a acelerar el ritmo de las obras.
En referencia a las cartas y comunicaciones que vienen y van tanto del lado del contratista como de Transcaribe sobre diversos temas, Chartuni asevera que “lo que queremos es que se escriba menos y se trabaje más para que los ciudadanos no sigan padeciendo con estas obras”.
Finalmente, Chartuni indica que: “No quiero que este contrato se convierta en una ejecución a través de los medios de comunicación” y asegura que hablará con los representantes del Consorcio Cartagena para buscar alternativas que permitan avanzar rápidamente en los trabajos, que hoy tiene solo un 30 por ciento de avance.
HABLA INTERVENTORÍA
Manuel Alfaro Cortés, representante de la firma Consorcio RYU – MAB a cargo de la interventoría en el tramo 5A de Transcaribe, dice que “por lo menos desde abril de este año el contratista ha tenido zonas amplias y listas para la intervención por lo que el asunto predial no justifica las demora en obras”.
Alfaro agrega que “en muchos casos el contratista no logra superar los 30 centímetros cúbicos de concreto fundido por día, pese a que puede fundir hasta 100 centímetros cúbicos porque hay zonas listas para hacerlo y sin embargo no se cumple esa meta”.
El vocero de la interventoría señala que si el contratista usa el pleno de sus capacidades, financieras, técnicas y de personal puede entregar el tramo listo el 31 de mayo de 2012, incluida la demolición de la Loma de Bazurto y la construcción en su lugar de una gran rotonda.
“En este momento se puede decir que al contratista le falta personal para intensificar y acelerar los trabajos, teniendo en cuenta que este es un contrato que requiere de la utilización de mucha mano de obra”, puntualiza Alfaro.
“NOS DEFENDEREMOS”
Enrique Chartuni, gerente de Transcaribe, dice que el equipo jurídico del ente gestor está preparando su defensa ante la demanda interpuesta por el Consorcio Cartagena 2010 ante el Tribunal de Arbitramento de la Cámara de Comercio de Cartagena.
Este contratista pretende que el Distrito y Transcaribe le paguen a través de esta demanda unos $12.860 millones, correspondientes a sobrecostos, que según ellos, se han generado por el retraso que han generado las obras la no entrega a tiempo de predios y espacio público requeridos para el avance de los trabajos.
“Tenemos argumentos jurídicos y pruebas suficientes para defendernos en este proceso, que entre otras, no afecta la continuidad de los trabajos”, aclara el Gerente de Transcaribe.