Transcaribe, a responder por presunto detrimento patrimonial

A $2.903 millones asciende el presunto detrimento patrimonial causado al Distrito a raíz de los incumplimientos en los plazos de ejecución y entrega de las obras de Transcaribe en Cartagena.
Así lo señala un Informe de Auditoría hecho por la Contraloría General de la República y la Contraloría Distrital de Cartagena, según el cual estos retrasos en los trabajos se deben “entre otras causas a la deficiente planeación de la empresa que elaboró los diseños (Fonade), atrasos en la etapa preliminar y de construcción, y a la demora en la entrega de zonas de obra”.
Hernando Sierra Porto, contralor distrital, agrega que en esta auditoría se detectaron otras fallas como reinvasión de los espacios públicos recuperados para la realización de las obras de Transcaribe, deterioro del mobiliario urbano instalado en desarrollo del proyecto, la construcción sin autorización de rampas para carros, y falta de mantenimiento en los drenajes pluviales habilitados en cada uno de los tramos construidos.
El Jefe del ente de control local reconoce que “en este sentido la responsabilidad atañe directamente a la Alcaldía de Cartagena, la cual debe establecer mecanismos para velar porque las zonas peatonales se mantengan despejadas, el mobiliario en buen estado y los drenajes funcionando correctamente, de manera que cuando empiece a operar el sistema las obras realizadas aún estén en óptimas condiciones y no viejas y acabadas”.
El Informe indica además fallas en la construcción de rampas de acceso para que los discapacitados puedan usar el sistema, toda vez que muchas de estas superficies inclinadas están tienen bordes de hasta 20 centímetros de altura, que dificultan la circulación de las personas que no gocen del pleno de sus capacidades motrices.
A RESPONDER
Sierra afirma que “estos hallazgos dan pie a la apertura de un proceso de responsabilidad fiscal, que en esta caso involucra al gerente de Transcaribe (Enrique Chartuni González), quien será llamado a responder por las fallas detectadas y tendrá la oportunidad de rendir descargos”.
El Contralor explica que este es un proceso largo en el que se reciben que luego de analizar permiten emitir un fallo que determine si hay o no responsabilidad fiscal del funcionario.
En caso de que se defina que Chartuni sí tiene responsabilidad este tendría que responder con recursos propios por el monto estimado como detrimento patrimonial.
Sierra asevera que este Informe de Auditoría es producto de una revisión iniciada en agosto de 2010 en cada una de las obras y contratos de los tramos construidos y en ejecución, que incluso motivó antes de la entrega de los resultados finales, le emisión de funciones de advertencia al Distrito y Transcaribe que permitieron la solución de fallas detectadas en algunas obras.
Este es el caso del Puente de Las Gaviotas y del espacio público del segundo tramo, donde la Contraloría identificó fallas que fueron corregidas y costeadas por el contratista CCMV Transcaribe Dos, sin que hubiese amenaza de sanción por parte de la Alcaldía ni de ente de control alguno.
SE DEFIENDE
Enrique Chartuni, gerente de Transcaribe, dice que no ha sido requerido por la Contraloría para responder personalmente por ninguno de los hallazgos incluidos en el Informe de Auditoría pero asegura que está dispuesto a cualquier llamado que se le haga.
El funcionario está convencido de que su gestión se ha apegado a las normas de contratación nacionales y del Banco Mundial y que por tanto aportará las pruebas necesarias para desvirtuar los hallazgos expuestos por los entes de control.
Chartuni añade que “ya se está trabajado en la elaboración de una plan de mejoramiento que permita evitar a Transcaribe que se vuelvan a presentar muchas de las fallas detectadas, especialmente en cuanto a obras defectuosas”.
NO OPERARÁ EN 2012
El contralor distrital, Hernando Sierra, considera que contrario a lo que se ha anunciado, Transcaribe no empezará a operar el año entrante, debido a los atrasos que aún tienen los tramos en construcción.
Al vocero de este ente de control en Cartagena le preocupa especialmente las obras del tramo 5A, entre Bazurto y La Popa, el cual contempla la demolición que une a El Prado con el Mercado de Bazurto, que es una obras de gran envergadura que podría tardar muchos meses, teniendo en cuenta los antecedentes de los contratistas que ha tenido este proyecto en cinco años de ejecución.