“No se dejen estafar. Las casas de Ciudad Bicentenario son gratis. Rieguen la bola”.
Con esas palabras terminó su discurso Pablo Gabriel Obregón, presidente de la Fundación Mario Santo Domingo, durante la entrega de 30 casas a familias que lo perdieron todo la pasada ola invernal.
Obregón Santo Domingo advirtió, ante la confirmación de la estafa a cientos de personas por parte una mujer que se hacía pasar como funcionaria del Distrito, que el único requisito para tener una casa en Bicentenario es no tener donde vivir. “Pero deben ir a las oficinas de Corvivienda, a la Alcaldía, a las oficinas de la Fundación Mario Santo Domingo a inscribirse. Ninguna persona hace trámites, ni cobra un peso por adjudicar una casa”, dijo.
El caso de la estafa de la que han sido víctimas más de 1.000 familias de diferentes sectores de la ciudad fue denunciado por amas de casa de Blas de Lezo, hasta donde llegó Maritza Ríos Primiceiro, a ofrecer formularios para acceder a una vivienda a cambio de $50.000.
Casas nuevas
Con cierta tristeza por la reciente pérdida de su esposo, Olga Esther Vega García, recibió ayer la casa 33 de la manzana 39 de Bicentenario.
“Es que ahora me tocará vivir sola en este barrio porque mi esposo, Alberto Flórez Hernández, se me fue hace un mes. Él no soportó perder la casita que habitamos por más de 57 años en la segunda revuelta a la subida de la Popa, se enfermó y al poco tiempo murió”, dijo la mujer de 73 años.
Según Olga, la casa será habitada por ella y dos de sus hijos. “No será la casa grande en que vivimos tanto tiempo, pero por lo menos tendremos un techo seguro y propio. Por eso le doy las gracias a la Alcaldesa y a la empresa privada que apoyó este proyecto”, dijo la mujer.
Con ella, otras 29 familias que habitaban en las faldas de la Popa y la Loma del Marión, quienes perdieron sus casas en el pasado invierno, recibieron sus viviendas. Los donantes de las viviendas son la Alcaldía de Cartagena con $4 millones por familia, la Fundación Mario Santo Domingo $4 millones por casa y otros $400 millones que donó Ospinas y Compañía SA, una empresa socialmente responsable y comprometida con Cartagena y el país.
Otra de las beneficiadas con una vivienda es Carmela Pérez Segovia, cuya casa se desplomó en las faldas de la Popa. “Pensé que el proceso sería muy demorado, pero le doy gracias al Distrito, a la Fundación Mario Santo Domingo y a Ospinas y Compañía por haberme ayudado a tener mi casa. Me mudo mañana mismo”, dijo.
Angela Angulo, ama de casa de Lo Amador, no pudo contener sus lágrimas cuando recibió las escrituras de su nueva vivienda. “Yo quisiera mudarme hoy mismo y empezar una nueva vida en la Ciudad Bicentenario”, dijo la mujer.
Las familias beneficiarias recibieron las llaves de la vivienda que comenzarán a habitar en los próximos días.
Por su parte, la alcaldesa, Judith Pinedo, dijo que Ciudad Bicentenario no es un barrio, es un concepto de vida. “Todo el que se mude en esta ciudad, debe aportar para construir comunidad. Aquí tendrán hospitales, megacolegio, escenarios deportivos y seguridad”, dijo.
Así mismo, Andrés Arango Sarmiento, presidente de Ospinas y Cía S.A., dijo que “nosotros creemos en los proyectos de alto impacto como este, el cual ofrece un buen modelo de Vivienda de Interés Social (VIS). En nuestro sector sabemos que las acciones que le apuestan a la transformación urbana son un valor agregado en la calidad de vida de los colombianos, y este proyecto cumple con estas características”.
De interés
La primera etapa de Ciudad Bicentenario son 23 hectáreas, cuyas obras de urbanismo están en un 99%. Hasta el momento, hay construidas 817 casas; de las cuales 660 están habitadas y el resto están en proceso de conexión de servicios públicos.
“Son miles los estafados”
Las personas supuestamente estafadas por Maritza Ríos Primiceiro, una mujer bajita, de contextura gruesa, de buenas maneras, que se hacía pasar como funcionaria del Fondo de Vivienda de Interés Social (Fovis) pueden pasar de tres mil, de acuerdo a lo expresado por Luis González-Rubio Caraballo, un comerciante de 30 años.
“A mí engañó con los $50 mil pesos para obtener el cupo para la vivienda en Ciudad Bicentenario. Pero además de eso, a unas 35 personas de mi núcleo familiar y amigos que referí, también estafó con $120.000 cada uno para entregarles una vivienda en cuestión de semanas”, dijo el joven.
Añadió que la mujer entregaba supuestos certificados de Bancolombia, a quienes les recibía el dinero y por eso la gente se iba tranquila. “Pero es que ella también se hacía pasar como tramitadora de Bancoldex, y pregonaba que podía conseguir créditos de tres millones de pesos en adelante para invertir en pequeñas y medianas empresas”, dijo.
“Soy vecino de la señora Patricia García, en cuya casa se reunía Ríos Primiceiro, o como se llame, para pescar incautos. Yo creo que esa señora estafó a más de 3.000 personas de todos los barrios de Cartagena. Es que todo el mundo le llevaba referidos y la mujer con su astucia y sin desespero los embaucaba”, agregó.
González-Rubio señaló que ayer mismo instauró denuncias en la Fiscalía donde, según él, tienen fotos de ella y están tras la pista. “Me duele porque a través de mi persona cayeron otros amigos y familiares”, sostuvo.
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