No importa si llegas en bus, carro, camioneta o moto. Todo el que llega a La Boquilla es asediado por unos hombres que se ofrecen a llevarte a los mejores lugares.
¿A qué precio?
Los “pide,pide” es el nombre con el que los nativos del corregimiento de La Boquilla han bautizado a estos peculiares jóvenes, inculpados de espantar a los turistas con los abusos en los cobros.
El más reciente caso de sobrecostos en los alimentos en La Boquilla, se ha vuelto viral en las redes sociales. Unos turistas tomaron la foto de la factura por el cobro de 271 mil pesos por tres mojarras rojas, una mojarra negra, cuatro sancochos de pescado y dos bebidas.
Esto ocurre pese a que la Asociación de Restauranteros de este corregimiento, que agrupa a 135 propietarios de establecimientos, acordaron en octubre una lista de precios fijos, que debe estar a la vista de todos los clientes.
Es por eso que William González, bogotano, siempre toma precauciones al momento de ir a La Boquilla.
“Nos han correteado pero tenemos cuidado. La idea que tiene uno es que lo pueden estafar así que vamos a sitios recomendados y preguntamos siempre antes de pedir la comida”.
Eso no se hace
El sobrecosto en los alimentos y servicios fue rechazado por la Corporación Turismo Cartagena de Indias.
“Nosotros hacemos un esfuerzos muy grande por promocionar la ciudad. La competencia es cada vez más difícil. No podemos matar a ‘la gallina de los huevos de oro’ que es el turismo. Si abusamos del turista, éste se va a ir insatisfecho, y nos va a espantar a cinco extranjeros más. Entonces, pensemos en las responsabilidades que tenemos, no podemos abusar de los turistas, recordemos que los turistas son prestados, y cuando llegan a la ciudad es porque hay un gran trabajo detrás”, dijo Zully Salazar, directora de Corpoturismo.
La antioqueña Juana Useche aseguró que se ha sentido estafada más de un vez en las playas de La Boquilla.
“Una vez me cobraron 180 mil pesos por un masaje y por la comida también”.
Jean Flyan vino de Nueva York a Cartagena solo para conocer a Juana en persona.
Él le aseguró a El Universal que no le sorprenden los abusos en los precios porque sabe que al verlo, los vendedores intentarán cobrarle a precio de dólar.
En mayo de 2015, punto más crítico del malestar, se generó tras la denuncia que interpusieron ante la Fiscalía unos turistas por el cobro de 226.000 pesos por tres platos de sancocho de pescado, dos cervezas y una gaseosa.
Le preguntamos a Saidi Morales, cartagenera, y dijo que nunca había tenido problemas, piensa ella, que es porque hace parte de “los locales”.
La recomendación sigue siendo: antes de ordenar, asegúrese de cuánto le cobrarán por cada plato de pescado, cerveza o servicio que requiera.
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