Nicole Ramos, una joven de 17 años y con nacionalidad venezolana y colombiana, se prepara para viajar en agosto a la Northwestern State University, en Louisiana, Estados Unidos, porque ganó una beca para estudiar música.
Hace parte de la Escuela de Música de la caja de compensación familiar Comfenalco que hace más de cuatro años tiene una alianza con la universidad extranjera en mención, que beca a estudiantes sobresalientes en el ámbito académico y musical.
“Siempre quise estudiar en la Ciudad Escolar Comfenalco por la formación musical y pertenecer a la escuela de música es un logro personal, obtener la beca fue un logro mucho mayor”, dijo la joven quien vive en Cartagena hace nueve años y toca el violín.
Como Nicole hay 32 jóvenes que alistan sus tramites para irse a estudiar becados en la institución americana y 75 ya están formándose en el campus de este plantel, pero pese a la maravillosa oportunidad, no todo es color de rosa.
Claudia Navarro, gerente de Cultura de Comfenalco, explicó que una vez otorgada la beca, el trabajo de preparación de los muchachos es arduo porque incluye la formación en inglés y la preparación en Matemáticas, lectura y escritura para presentar las pruebas que hacen parte del proceso de admisión.
“Desde el comienzo del programa en 2013, el Colombo Americano nos ha apoyado con becas en inglés para los jóvenes, además del examen Toelf; y representantes de la Northwestern nos ayudaron para instalar un software que permite a los becarios hacer la prueba Accuplacer (requerida para la admisión) por menos dinero”, explicó Navarro.
Añadió que el trabajo de gestión, tanto de la escuela de música como de la familia de los becarios, no acaba ahí: “La universidad les costea la matrícula pero ellos deben asumir su manutención, hay algunos que están hasta sin seguro médico y tenemos que correr para conseguirlo”.
Según la gerente de cultura de Comfenalco, si bien el programa hace parte de la caja de compensación, necesitan ayuda tanto de privados como del Estado para que la estadía de ellos en el exterior mejore. Dijo que pese a que ha tocado muchas puertas, no han encontrado apoyo.
“Hemos tocado puertas pero no sentimos eco porque estamos dentro de una caja de compensación (...) esos muchachos cuando están allá dejan de ser afiliados y empieza el proyecto de país y de ciudad porque ellos están haciendo patria en Estados Unidos. Necesitamos que el Estado entre a ayudar, tenemos un consulado en Houston que no tiene ni idea que esos muchachos están allá.
“He pedido innumerables citas en el Ministerio de Cultura pero nada, hemos tocado con Plácido Domingo y con frecuencia salimos en los medios pero nadie siente la necesidad de ayudar a esos muchachos que están solitos. También pedimos la ayuda del Ministerio de Relaciones Exteriores pero tampoco hemos conseguido el apoyo”, comentó Navarro.
“Ayuda a un estudiante colombiano en el extranjero”
Además de las dificultades que deben afrontar los becarios de la Northwestern fuera del país, los estudios de posgrado comienzan a ser otra preocupación, por lo que el departamento de Cultura de Comfenalco considera crear un programa en el que particulares puedan adoptar a un estudiante colombiano en Estados Unidos para que siga aprovechando las oportunidades que se le presentan gracias a su talento y a su disciplina.
“Hace poco un estudiante becado logró ser admitido en una universidad de Inglaterra a la que se presentan miles de aspirantes pero por falta de recursos no pudo acceder a la institución y se devolvió al país”, contó la directora de Cultura de Comfenalco.
También planean hacer alianzas con otras universidades extranjeras como la Louisiana State University y con instituciones de educación superior nacionales como la Universidad del Norte, Institución Universitaria Bellas Artes y Ciencias de Bolívar (Unibac), entre otras, para que los estudiantes tengan una continuidad en sus estudios. “Queremos que nuestra escuela pueda brindar formación superior”, puntualizó Claudia Navarro.
Compromiso al 100%
La Escuela de Música de Comfenalco comenzó en 2002, siendo un proyecto exclusivo para los estudiantes de la Ciudad Escolar Comfenalco y años más tarde se ofreció al resto de afiliados de la caja de compensación, sin embargo la mayoría de sus estudiantes siguen siendo de la CEC. “Estos alumnos están agrupados en cursos específicos, no dictan clase de artística sino música y en contrajornada están en la escuela de música. Es tanto el compromiso de los estudiantes con este proyecto que bien puede permanecer toda la tarde en el colegio y los fines de semana se van a conciertos (...) se convierte en un proyecto de vida”, indicó Zayda Acevedo, rectora de la CEC.
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