Actual director del DAS también sería responsable de las chuzadas

El actual director del DAS, Felipe Muñoz, también habría resultado salpicado dentro del proceso que se sigue por las interceptaciones y seguimientos ilegales a miembros de la oposición, periodistas y magistrados de las altas cortes. Noticias Uno denunció el fin de semana que el ex funcionario del DAS que el viernes pasado se acogió al principio de oportunidad y así se comprometió a dar información sobre las “chuzadas” ilegales del DAS, por lo que fue cobijado con protección especial, aseguró que Muñoz le impidió al CTI acceso al archivo de tres importantes operaciones: Falcom, Fénix y Cóndor, cuando el CTI realizaba investigaciones en las insta-laciones de esa entidad (DAS). El testigo, quien trabajó hasta abril pasado al Departamento Administrativo de Seguridad -DAS-, habría manifestado que hizo parte de la Di-rección de Contrainteligencia que dirigió el ex capitán Jorge Alberto Lagos. En ese sentido señaló que mientras los funcionarios del CTI buscaban evidencias en las instalaciones, un funcionario del DAS a quien el noti-ciero de televisión identifica como Carlos Orjuela Manipulaba destruía evidencias contenidas en documentos y discos duros. VÍA LIBRE Ante estos señalamientos Muñoz se defendió y desmintió lo dicho por el testigo y aseguró que desde el primer día de allanamientos, hasta hoy, la Fiscalía siempre ha tenido vía libre dentro de las instalaciones del DAS. “Eso no es cierto, la Fiscalía estuvo desde el día 23 de febrero del año 2009 a las nueve de la mañana hasta hoy y siempre han tenido libre acceso. Yo no soy el que dirijo las operaciones de la Fiscalía”, respondió el director del DAS, Felipe Muñoz. Así mismo, el funcionario explicó que las operaciones especiales a las que alude el referido testigo no tienen nada que ver con los seguimientos y las interceptaciones que se les hicieron a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, ni a políticos de oposición, y mucho menos a periodistas. “Esos temas Falcom, Fénix y Cóndor absolutamente nada tienen que ver con lo que aquí se está discutiendo, eso es información de Contrainteligencia de Estado y es información que tiene carácter de seguridad nacional”, aseguró Muñoz. ASESINATO El testigo también habría afirmado en entrevista con la Fiscalía que el asesinato de dos personas en una fiesta de Halloween en Chía, el pasado 31 de octubre, no fue un acto de locura de un funcionario del DAS como fue presentado, sino que fue un crimen premeditado para silenciar a unas personas que tenían información sobre irregularidades del DAS. INFILTRADO EN LA CORTE El testigo hoy bajo el resguardo por orden judicial reveló que el DAS tenía un infiltrado dentro de la Corte Suprema de Justicia y que un fun-cionario llamado William Romero era la persona encargada de manejar esa fuente humana. De acuerdo con el testimonio, María del Pilar Hurtado pedía informaciones de magistrados políticos opositores y periodistas que luego eran entregadas a funcionarios de la Casa de Nariño para ser usadas en operaciones de desprestigio. El ex funcionario del DAS aseguró que la información de Piedad Córdoba le fue entregada al entonces Alto Comisionado para la Paz Luis Carlos Restrepo, al ex ministro de Defensa Juan Manuel Santos y a altos mandos militares. Se conoció también que hay pruebas de que el testigo visitó en varias ocasiones el palacio presidencial y se reunió con altos funcionarios de la Casa de Nariño, según Noticias Uno. Por su parte, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Jaime Arrubla, reiteró que "no es posible que ninguna autoridad pública tenga ex-pedientes o carpetas o archivos confidenciales sin autorización de ninguna de las personas particulares o magistrados". IMPLICADOS El testigo que ahora se convierte en fundamental para la Fiscalía también aseguró que de las operaciones de seguimientos ilegales no sólo tuvo conocimiento el actual director de la entidad Felipe Muñoz, sino también los ex directores Jorge Noguera, Andrés Peñate y María del Pilar Hurtado también sabían de todos los monitoreos y seguimientos ilegales y que incluso ellos mismos ordenaron algunas actividades. Andrés Peñate, ex director del DAS dijo que nadie le informó sobre la existencia del G3, ni de sus métodos, ni quiénes eran sus objetivos, aseguró además que varios funcionarios de la entidad tenían ordenes de desprestigiarlo.