Así fueron recibidos los medallistas Olímpicos en Bogotá

Muchos desconocían el nombre de cada uno de los deportistas que saludaban desde el carro de bomberos; todos sabían, o lo notaron por la algarabía, que esos muchachos vestidos de amarillo que sonreían desde la plataforma de la maquina de apagar incendios, eran sus medallistas olímpicos.
Mariana, Jackeline, Caterine, Yury, Carlos Mario y los ‘Óscares’, campeones en Londres 2012 fueron recibidos en su tierra como verdaderos héroes. Junto a ellos, en medio de los gritos de bienvenida y agradecimiento, el resto de la delegación y las viejas glorias olímpicas colombianas, cruzaron la línea de meta más esperada tras su regreso a casa: la trazada por sus coterráneos a lo largo de las avenidas colombianas.
Sobre las 9:00 de la mañana de este miércoles, partió la caravana olímpica de la sede de Coldeportes Nacional, en Bogotá,  y la noticia corrió más rápido que los dos carros de bomberos y el bus intermunicipal en el que se transportaba la delegación. Así se pudo notar a lo largo del recorrido, cuando fue creciendo el público que ondeaba la bandera tricolor a cada uno de los lados de las calles, sobre los puentes y desde las ventanas de casas y edificios de la Capital.
“Teníamos un poco de años que no habíamos ganado medalla de oro en los Juegos Olímpicos, esto me llena de orgullo como persona, como calle, como el paisano. Yo sabía desde anoche que ellos venían a hacer este recorrido y este homenaje es merecido, es con orgullo y con amor de todos los colombianos”, comentó Jack Harley López, un comerciante barranquillero, quien acompañó el desfile a bordo de su bicicleta y con una bandera de Colombia que cubría su espalda.
Hasta la abarrotada Plaza de Bolívar, donde la noticia ya era todo un acontecimiento, también llegó Héctor Rojas, un vendedor ambulante que aprovechó para saludar a los campeones desde el andén y para vender muchas de las banderas con las que se vistieron los fanáticos y desprevenidos transeúntes que decidieron sumarse al homenaje de la delegación colombiana más ganadora en la historia de unas olimpiadas.
“Agradecerle a estos muchachos todo lo que han hecho por Colombia, eso es lo importante. Estamos vendiendo y ojalá el público compre la banderita para que así en nuestros días patrios seamos más orgullosos de portar el estandarte colombiano”, precisó el emocionado vendedor y fanático patrio.
Así, durante dos horas y media, Pajón, Rentería, Ibargüen, Alvear, Oquendo, Muñoz y Figueroa (en nombre propio y del medallista ausente, Rigoberto Urán), recorrieron las principales calles de la Capital del país, de la tierra a la que hoy volvieron siendo más famosos que nunca.
Una fama que compartieron con el mismo presidente de la República, quien los recibió en la Casa de Nariño para el homenaje que ellos y la delegación nacional completa se granjearon con cada salto, brazada, golpe, levantamiento, lanzamiento, kilómetro o pedalazo que les dio la gloria en Londres.
DATO
En la plataforma de la principal maquina de bomberos que hizo parte de la caravana olímpica, hicieron presencia los medallistas olímpicos de Sydney 2000, María Isabel Urrutia; Atenas 2004, Mabel Mosquera; y Beijing 2008, Diego Salazar. El ciclista antioqueño, Rigoberto Urán, medalla de plata en la prueba de ciclismo de ruta en Londres 2012, no pudo estar en el homenaje de este miércoles pues se encuentra en Europa preparándose para competir en próximos días en la Vuelta a España.
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